Debido a las adversas condiciones climáticas, Flybondi no pudo inaugurar el aeropuerto de El Palomar con el vuelo Córdoba–Buenos Aires, que debió aterrizar en el Ministro Pistarini de Ezeiza.
El vuelo de la low cost salió a las 7:45 desde Córdoba y debió ser desviado porque el aeropuerto de El Palomar no está preparado para aterrizaje en estas condiciones climáticas.
⚠️🌩 Finalmente el vuelo precedente de Córdoba que se dirigía a El Palomar, aterrizó en el Aeropuerto de Ezeiza debido a las malas condiciones climaticas. 🛫🌩 pic.twitter.com/9AZxp695F3
— Aeropuertos Argentina (@AeropuertosAR) February 9, 2018
Los pasajeros que estaban en la sala de preembarque de El Palomar para despegar a las 10.30 en el vuelo que llegaría desde Córdoba esperaban saber si serán trasladados a Ezeiza para abordarlo desde ese aeropuerto.
Desde temprano, a las 8 de la mañana, la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) informó que los vuelos comerciales provenientes de la ciudad de Córdoba se encontraban demorados por tormentas eléctricas.
«Las condiciones meteorológicas podrían llegar a afectar los vuelos de las zonas limítrofes», agregó incluso el organismo, aunque aclaraba que eso no afectaba al aeropuerto internacional de Ezeiza.
No obstante, Aeropuertos Argentina 2000 informó a través de su cuenta de twitter que el avión de Flybondi que aterrizó en Ezeiza proseguirá su ruta hacia El Palomar para despegar desde ese aeropuerto el viaje previsto a Córdoba.
🛫 El avión de @flybondioficial que aterrizó en Ezeiza, llegará en breve a El Palomar para realizar el vuelo con destino a Córdoba.🛫
— Aeropuertos Argentina (@AeropuertosAR) February 9, 2018
No fue bueno el comienzo de las operaciones de Flybondi en el país. El sábado, un avión de la empresa que cubrió el trayecto Bariloche-Córdoba debió despegar sin las valijas de los pasajeros ya que las altas temperaturas redujeron la cantidad de peso que podía tener la aeronave. Por lo tanto, el equipaje tuvo que ser transportado por tierra.
Ayer, la misma low cost tuvo demoras en un vuelo de Córdoba a Bariloche y tuvo que cancelar el viaje que volvía a Córdoba.
En una prueba piloto que realizaron apenas unos días antes de comenzar a operar, la aerolínea debió hacer un aterrizaje anticipado por una falla en «un instrumento de medida a bordo».