Acusado por una sobrina por supuesto abuso sexual, el tucumano José Alperovich pidió ayer una licencia a sus labores como senador nacional.

Pese a resistirse en un primer momento, Alperovich decidió suspender su trabajo legislativo hasta que la Justicia esclarezca la denuncia en su contra por violación a una sobrina que trabajaba con él.

La joven, que actualmente tiene 29 años, amplió ayer la denuncia contra su tío en tribunales de Tucumán y dio detalles sobre los hechos de presunto abuso que, según aseguró, se produjeron entre fines de 2017 y mayo de 2019 tanto en la ciudad de Buenos Aires como en la provincia norteña.

Varios dirigentes del Frente de Todos le habían reclamado a Alperovich que presentara una licencia a su cargo para no comprometer a los senadores peronistas mientras transcurriera la investigación de los hechos denunciados. Uno de ellos, Felipe Solá, en declaraciones a Luis Novaresio por radio La Red: «Si yo fuera Alperovich, pediría licencia».

 

El escándalo que involucra al tucumano se destapó escasos días después de que se conociera el anuncio de que se uniría junto a su par coprovinciana Beatriz Mirkin a la bancada del Frente para la Victoria, que a partir del 10 de diciembre podría fusionarse con la del bloque Justicialista.

En declaraciones formuladas a radio Futurock antes de que trascendiera el pedido de licencia, la senadora nacional pampeana del PJ Norma Durango le había aconsejado públicamente al tucumano que adoptara dicha decisión para «no poner al pleno en una situación tan difícil».

«Es muy duro tener a un colega que se siente en una banca igual que nosotros y esté denunciado por estas situaciones», señaló.

Más cauta fue había sido la reacción del senador aliado al kirchnerismo Fernando «Pino» Solanas, quien en declaraciones a radio La Patriada dijo que habría que «esperar a ver qué dice la Justicia».

«Soy un militante de los derechos de la mujer, y por supuesto que si se confirma sería lamentable», aclaró Solanas que en el Gobierno de Alberto Fernández asumirá como embajador argentino ante la UNESCO.

«Si aceptamos cada denuncia sin investigación capaz que nos quedamos sin senadores, hay que ser serios», agregó.