Entre las 5.30 y las 7.30 de esta mañana, los Metrodelegados realizaron un paro en la Línea A  en rechazo del acuerdo paritario firmado la semana pasada por la Unión Tranviarios Automotor (UTA) del 15% pagadero en tres tramos.

os trabajadores de UTA los que denunciaron que este martes intentaron «ejercer el derecho al trabajo» y no pudieron: «No estamos de acuerdo ni con el paro ni con el levantamiento de molinetes», dijo Cristian Sala, delegado del gremio.

«Los Metrodelegados tomaron los trenes y no han permitido que las personas que estaban dispuestas a dar servicio puedan salir a manejar», denunció la UTA.

Es este gremio el que firmó un aumento del 15% dividido en tres tramos: «Es el mejor acuerdo posible, un aumento digno y los trabajadores de los subtes lo saben», agregó.

«El derecho a huelga existe, pero también el derecho a trabajar», agregó Hugo Barrios, del consejo nacional de UTA.

Los Metrodelegados aseguran que es un 13% anual el aumento firmado, y no el 15, porque la última cuota del acuerdo se cobra en febrero. «El Gobierno reconoce una inflación mayor al 20% pero sigue firmando paritarias del 13%», denunció el gremialista Roberto Pianelli. 

Por eso, los metrodelegados, que no pudieron participar de la paritaria, anunciaron un plan de lucha que comenzó ayer y se extenderá al menos hasta el jueves. 

El plan de lucha de los metrodelegados continuará mañana con la apertura de los molinetes de la estación Juan Manuel de Rosas, cabecera de la B, también entre las 7 y las 9. Y el jueves, esa línea será la que no andará en las primeras horas de la mañana, de 5.30 a 7.30, lo que perjudicaría a unos 15.000 pasajeros. No se descarta que los trabajadores anuncien más medidas de fuerza para los días siguientes.