El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, aseguró que Estados Unidos mantendrá su cerco a la «dictadura» del gobernante Nicolás Maduro y no cejará hasta que la «libertad y la democracia sean restauradas en Venezuela». Pence cargó contra lo que calificó como el «brutal régimen» de Maduro y su «Gobierno socialista», responsable, dijo, de que 9 de cada 10 venezolanos vivan sumidos en la pobreza.
A su vez, denunció que más de tres millones de venezolanos han dejado ya el país «huyendo de la brutalidad del régimen» y tuvo, a continuación, palabras de elogio para Fabiana Rosales, esposa del líder antichavista Juan Guaidó, quien el 23 de enero último se proclamó presidente encargado de Venezuela y ha sido reconocido como tal por más de medio centenar de naciones.
El presidente Donald Trump se había reunido por sorpresa en Washington con Rosales, donde ella denunció que temía «por la vida» de su marido y que en Venezuela la población se muere de hambre y falta de atención médica en los hospitales. El vicepresidente expresó el compromiso de su Gobierno en los «esfuerzos» para asfixiar a la «dictadura de Maduro económica y políticamente» en el ámbito internacional.
En su gira por varios países de América, Rosales ya visitó Nueva York esta semana y se reunió este miércoles con Pence y Trump en Washington. En su denuncia sobre los ataques a la libertad en el hemisferio, Pence hizo una referencia directa a la violenta represión que ejerce el presidente nicaragüense Daniel Ortega sobre la oposición y los manifestantes, con sacerdotes acosados, arrestados por proteger en sus iglesias a manifestantes contrarios al régimen.