El supuesto autor de la ola de paquetes bomba que ha sacudido en los últimos días la localidad de Austin, en el estado de Texas, se ha hecho explotar durante una operación llevada a cabo por las fuerzas de seguridad este miércoles de madrugada, según fuentes consultadas por varios medios de comunicación estadounidenses. El sospechoso, que se ha suicidado en Round Rock, un pueblo situado a 20 minutos al norte de Austin, tenía 24 años y era blanco. La Policía sigue investigando si el «Unabomber» de Texas tenía cómplices.

Las autoridades han dado con el sospechoso a raíz de la información recabada tras la explosión de un artefacto el martes en unas instalaciones de la empresa de mensajería FedEx. Entre las pruebas recabadas figuran imágenes de cámaras de seguridad y rastreos del teléfono móvil, informa el periódico local ‘Austin American-Statesman’.

El Departamento de Policía de Austin ha confirmado de madrugada un tiroteo en una autopista de la zona, durante una operación policial. Fuentes consultadas por la cadena NBC han asegurado que el sospechoso está neutralizado, aparentemente después de que se quitase la vida con uno de sus propios artefactos explosivos.

Esta persona, cuya identidad no ha trascendido, sería la responsable de una cadena de cuatro explosiones que ha sacudido Austin desde el 2 de marzo y que causó dos muertos y cuatro heridos. En estos casos, en la colocación de los artefactos no medió ningún mensajero.

El martes, una quinta bomba estalló a primera hora en un centro de reparto de FedEx en Schertz, mientras que se localizó otro artefacto sin explotar en otras instalaciones de la misma empresa en Austin, aunque las autoridades sospechan ‘a priori’ que ambos incidentes no tienen relación con las primeras cuatro explosiones.