El Diputado Nacional Nicolás Massot y el economista José Luis Espert protagonizaron un fuerte cruce durante el programa La Noche de Mirtha Legrand, que terminó cuando la diva tuvo que pedir un corte.

Desde el inicio ambos personajes se trenzaron ante cada tema de economía o política. La inflación, el déficit, los impuestos y los pasajes en el Congreso fueron los principales tópicos por los cuales se tiraron con todo.

Espert disparó con munición gruesa: «La única rebaja del gasto público en serio que hubo, porque todo lo demás es chamuyo, fue la baja de subsidios que se hizo con el tarifazo». El legislador se lo negó enfáticamente y le redobló cintando que la reducción del déficit de Aerolíneas Argentinas y la renegociación de la compra de medicamentos en el PAMI.

«Esos son dos pesos con cincuenta», devolvió con su clásica ironía el economista. «Bajar 450 mil millones de pesos en subsidios es reducir el gasto público, yo te hablo de montos grandes, vos me hablás de chiquitaje», remató.

Mirtha cambiaba de tema. De a ratos hablaba el político Gustavo Vera, en otro momento Horacio García Belsunce hacía de defensor de su familia ante las novedades del famoso caso. Pero se respiraba tensión hasta que se volvieron a trenzar.

Massot ya no se guardó las formas e irónicamente le dijo a Espert que era fácil «hacer planillas de cálculos y escribir libros» y recalcó que sus políticas representan «un ajuste brutal».

«Para mí vos sos como el Tano Pasman, todos te miramos, sos un tipo que rezonga mucho pero cuando te pongas los cortos te desgarrás en el primer corner» dijo Massot, y Espert retrucó: «Si vos decís que soy como el Tano Pasman, yo te digo que sos un mamarracho del PRO»

«Bueno, basta, he tenido muchos escándalos en la mesa así que dejemoslo por favor, y hablen de a uno porque no se entiende nada» intervino Mirtha, para cerrar el tema.

Por último, sobre los sueldos de los legisladores, Massot dijo que no le parecen excesivos los sueldos de los diputados y opinó: «Gestos sobran, tenemos que ganar tres veces más de lo que ganamos. Cobramos el 40% de lo que deberíamos cobrar».