El Secretario de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Julio Cordero, pidió este viernes a la CGT que «reflexione» tras haber anunciado que se retiraba del diálogo social con el gobierno.
«Ojalá (la CGT) reflexione sobre esta posición, debemos avanzar en normativas y consensos que son esenciales para una Argentina que convierta en realidad sus propios sueños de grandeza», indicó el funcionario.
Asimismo, indicó que «es tiempo de deponer los intereses sectoriales en pos del bien común, y el diálogo es el camino».
A través de un comunicado, Cordero remarcó que «la mesa del diálogo se mantendrá siempre abierta a todos los que quieren formar parte de ella», aunque aclaró que «la misma debe conformarse sin exigencias previas».
«Se invitó a la cúpula de la CGT a traer a la mesa todos los temas que quisieran tratar vinculados al capítulo laboral del DNU 70/2023 para que fueran consensuados; siendo que el mismo se encuentra en tratamiento ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación y nada impide un consenso previo sobre cada uno de los puntos antes de tomarse, por las partes, o por la misma Corte, una decisión definitiva», agregó Cordero.
Este jueves el Consejo Directivo de la CGT definió su postura en un encuentro realizado en la sede de Azopardo 802 en donde hubo mucha catarsis de los dirigentes por los efectos del ajuste y la recesión en las distintas actividades y un intenso debate sobre los próximos pasos de la central obrera: además de la decisión de no participar del encuentro con Cordero y los empresarios del G6, se aprobó la propuesta de Pablo Moyano de que la CGT acompañe el 7 de agosto la marcha de los movimientos sociales a San Cayetano y, además, se convocarán al plenario de secretarios generales y al de delegaciones regionales de la CGT, aún sin fecha, para decidir cómo seguirá el plan de lucha.
La CGT endureció su postura y se retiró del «diálogo social» con el Gobierno
La Confederación General del Trabajo resolvió este jueves retirarse del «diálogo social» con el Gobierno y el sector empresario que había sido promovido en el marco del Consejo de Mayo, por lo que no asistirá a la reunión tripartita que estaba prevista para el miércoles de la semana próxima. Así se definió en una reunión de más de tres horas que el Consejo Directivo de la central obrera mantuvo en su sede de la calle Azopardo, donde además anticipó que el 7 de agosto se plegará a la movilización que las organizaciones sociales realizan todos los años a San Cayetano.
Enojados con el Gobierno, los referentes cegetistas dejaron de lado sus diferencias y consensuaron abandonar la mesa de diálogo con la Casa Rosada, luego de aducir que la gestión de Javier Milei avanzó por su cuenta con la reglamentación de la vuelta del Impuesto a las Ganancias y la nueva figura de colaboradores independientes para que empresas puedan tomar hasta tres trabajadores bajo el sistema de monotributo, dos cuestiones que integran la aprobada ley de Bases y que cayeron muy mal en los sindicalistas.
Tampoco gustó que el Gobierno no diera ningún paso tendiente a retirar la apelación que hizo al amparo presentado por la CGT para declarar ilegal el capítulo de reformas laborales contenidas en el mega DNU, que sigue sin entrar en vigencia porque la central logró frenarlo en la Justicia laboral, detalló Héctor Daer. El referente del gremio de la Sanidad lamentó que el Gobierno no haya dado “respuesta a temas fundamentales» que habían pedido como gesto en la reunión que tuvieron la semana pasada con Julio Cordero.

Además, Daer dijo que rechazan de la ley de Bases la iniciativa de despido con causa, al señalar que se trata de «un articulo muy mal escrito y nocivo», que supuestamente busca penalizar a los empleados que hagan bloqueos en las fábricas, pero que por su redacción podrían extender a otras formas de acción sindical, según alertó. «Habíamos quedado con el Gobierno en que íbamos a discutir la reglamentación, cuando el Gobierno luego reglamentó varios aspectos nocivos de la ley de Bases», argumentó sobre la decisión de la CGT.
Daer criticó duramente el contenido de la reunión del miércoles entre el Gobierno y los principales empresarios del país, conocidos como el “Grupo de los 6”, al señalar: «En vez de hablar con el secretario de Trabajo de cómo lograr más producción, más empleo, más inversión, la Unión Industrial Argentina fue a pedir que la agenda de discusión sea implementar lo que está frenado del DNU, que es precarizar más a los trabajadores y rapiñar derechos laborales, entonces esta CGT no va a ir a esa discusión», insistió.
Luego tomó la palabra su colega del triunvirato, Pablo Moyano, del sector más opositor al Gobierno, quien al ser consultado sobre un posible tercer paro en la gestión Milei, sugirió que los pasos que van dando los llevan hacia ese corolario. «El paro se va a dar naturalmente. Ya nos bajamos de la mesa tripartita, también vamos a convocar a las regionales…», enumeró el referente de Camioneros.