Pese a anuncios previos, el Gobierno nacional salió este miércoles a descartar la posibilidad de convocar a sesiones extraordinarias durante el mes de diciembre por la falta de acuerdos con la oposición para tratar y aprobar los temas que le interesan al Poder Ejecutivo, y evalúa posponer el llamado para febrero.

“Hasta hoy, miércoles a las 12.08, no están los acuerdos que nos indiquen un temario para tratar en sesiones extraordinarias”, confirmó el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en una rueda con la prensa acreditada en Casa Rosada. El funcionario habló con los periodistas en el Patio de las Palmeras luego de posar para algunas fotos con alumnos de una escuela industrial y con militantes de La Libertad Avanza de Olavarría, quienes estaban haciendo una visita guiada por el lugar.

Francos amplió: “Todos conocen cuál es nuestra situación parlamentaria, estamos en minoría, y saben que dependemos de preestablecer acuerdos para tratarlos en el Congreso”.

“Hoy no los tenemos [a los acuerdos], por eso, en diciembre no convocaríamos”, insistió Francos.

Hace una semana, el vocero presidencial Manuel Adorni había anunciado en su cuenta de X que el Gobierno había decidido esa alternativa e incluso con los temas que se iban a tratar fuera del período ordinario.

«Se ha tomado la decisión de convocar a sesiones extraordinarias. Las mismas se llevarán a cabo entre el 5 y el 27 de diciembre. El temario de las mismas será el siguiente: Reforma electoral, Reforma política, Juicio en ausencia, Ley anti mafia, Viajes del presidente, Reforma de los fueros de la política”, había escrito el funcionario, en un anuncio que ahora Francos salió a descartar.

Según analistas, la reforma electoral, que incluye la eliminación de las elecciones primarias (PASO), modificaciones en la publicidad estatal y el financiamiento a los partidos, es de los puntos que más traba las negociaciones con la oposición.

Y el oficialismo tampoco tiene la garantía de respaldo a la Ley Antimafias y al proyecto de reiterancia, impulsados por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, dos cambios claves en la “nueva doctrina de seguridad” anunciada por el presidente Javier Milei.

 

Villarruel convocó a sesión especial en el Senado para tratar los «actos inmorales» de Kueider

La vicepresidenta Victoria Villarruel convocó este miércoles al Senado a sesionar para tratar el caso del senador Edgardo Kueider, quien fue detenido en Paraguay con US$ 200 mil dólares en efectivo sin declarar.

«Llegó la hora de sacar la mugre del Senado, sin contemplaciones», dijo en un posteo que publicó en su cuenta de X y agregó: «Para no dilatar los tiempos, junto al presidente provisional Bartolomé Abdala llamamos a una sesión mañana para que tratemos los actos inmorales que son de público conocimiento del senador Kueider, y que exponen una vez más la hipocresía del kirchnerismo».

«Lo de Kueider es sin dudas un bochorno que merece recibir un castigo ejemplar, aunque al kirchnerismo lo único que le importa es quedarse con su banca (sí, Kueider entró en la boleta de Cristina) y así entorpecer la tarea de nuestro Gobierno. De esta manera, aprovechando la milagrosa nueva lucidez moral y ética de los esbirros de Cristina, me hubiera gustado incluir también, un proyecto presentado por el senador Abdala para suspender al senador Parrilli, quien irá a juicio oral nada más y nada menos que por encubrimiento agravado y TRAICIÓN A LA PATRIA (sic en original), pero no hubo consenso entre los senadores para firmar ese pedido lo cual lamento enormemente», afirmó.

Según Villarruel, «haber negociado la sangre derramada de argentinos inocentes es imperdonable y los argentinos de bien no queremos traidores a la Patria caminando por los pasillos de la Cámara por lo cual espero que los senadores de todos los bloques recapaciten y entiendan el cambio de época de una vez por todas”. E insistió: “Llegó la hora de sacar la mugre del Senado, sin contemplaciones ante la corrupción que puso a nuestro país de rodillas».

La sesión incluye un segundo proyecto de resolución que propone la suspensión de Kueider como senador nacional hasta el 1° de marzo próximo, a la espera de tener más información para tomar una decisión definitiva sobre el futuro del legislador, al que le queda un año de mandato en la Cámara alta y que está hoy detenido en Paraguay acusado de tentativa de contrabando.

Por el momento, ninguna de las iniciativas reúne los dos tercios de los presentes que exige el artículo 66 de la Constitución Nacional para remover o suspender a un legislador del ejercicio de su escaño. Kueider, por su parte, presentó un pedido de licencia, sin especificar si es con goce de su dieta ni el plazo.