En el primer trimestre de 2018 los ingresos de la provincia de Buenos Aires alcanzaron un total de 66.632 millones de pesos, un monto que representa un crecimiento del 29,6% en relación al mismo periodo del año pasado y se ubicó un 4,4% por encima de la meta.
Según comunicó ARBA en su página web, entre enero y marzo se recaudaron $42.214 millones en concepto de Ingresos Brutos, lo que implica un incremento interanual del 24,1%. En tanto que el Inmobiliario aportó $7.775 millones, lo que hace una suba de 52,1%, lo que refleja el aumento que dispuso la Provincia sobre este impuesto para 2018.
El Impuesto Automotor tuvo una recaudación de $8,081 millones, lo que hace un alza de 28,2%; mientras que Embarcaciones totalizó $77 millones, un aumento de 33,4%.
Ingresaron, a su vez, $5.840 millones por el Impuesto a los Sellos, con una suba de 28,7% y $2.479 millones se obtuvieron de los planes de regularización. Otros ingresos tributarios aportaron $164 millones.
El Estado bonaerense recaudó a lo largo de marzo un total de $21.952 millones compuestos por: $13.281 millones de Ingresos Brutos; $2.899 millones por Impuestos Inmobiliarios; $2.849 millones por Automotores; $56 millones de Embarcaciones; $1.894 millones del Impuesto a los Sellos; $925 millones por planes de regularización y $48 millones por otros planes.
Además, la Agencia de Recaudación realizó 3.956 intimaciones a grandes deudores, entre los que se encuentran personas físicas y empresas en instancia judicial y prejudicial, que acumulan individualmente una mora superior al millón de pesos por distintos impuestos.
El director de ARBA, Gastón Fossati, resaltó en un comunicado que “buscamos que estos deudores regularicen su situación fiscal y paguen todo lo que deben. Si muestran voluntad de cumplir evitarán las consecuencias del cobro por vía judicial”. Agregó que si mantienen su condición de incumplidores, quienes ya están en juicio enfrentaran en los próximos meses la posibilidad de remates, mientras que el resto, en instancia prejudicial, quedará sujeto a medidas cautelares como inhibiciones y embargos para garantizar el pago de las deudas.
