El ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, consideró hoy que el ataque a la comisaría de San Justo del lunes último, en el que fue herida de gravedad la sargento Rocío Villarreal, «está en gran parte esclarecido» ya que «están casi todos presos», y aseguró que se investiga si una abogada fue quien ingresó el teléfono celular con el que se planeó el rescate de uno de los presos.
En una conferencia de prensa que brindói este mediodía acompañado por el jefe de la Policía Bonaerense, Fabián Perroni en la sede de la cartera de seguridad provincial, Ritondo destacó el trabajo en conjunto con el Procurador de la Provincia, Julio Conte Grand, que les permitió a partir de escuchas detener a seis de los responsables.
Luego, admitió que se está investigando la forma en que los presos detenidos en las celdas de esa comisaría lograron acceder a teléfonos celulares, ya que la principal hipótesis es que la banda organizó el rescate del preso Leandro Aranda (22) mediante mensajes de Whatsapp.
«Se está investigando junto a Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad y la Justicia«, dijo el ministro, quien admitió que se cree que «una profesional» podría haber sido quien le facilitó el celular a Aranda para organizar con su novia -detenida e identificada como Zahira Ludmila Bustamante- su propia fuga.
Ritondo anunció el ascenso de la sargento baleada,
Rocío Villarreal al grado de subteniente, al igual que
a Ricardo Toledo; mientras que Diego Méndez, Adrián Barreto
y Javier Pérez fueron ascendidos de oficial subinspector a
inspector, y Javier Cuéllar, de principal a subcomisario.
“Desborda la cantidad de detenidos, muchas veces el esfuerzo policial para las requisas hace que no sean perfectas” explicó el funcionario, quien reconoció que en la provincia de Buenos Aires existe “un problema estructural” donde se alojan a los detenidos.
«Tenemos un problema estructural que es donde alojamos a los presos, pero también un trabajo de la policía que desde el 10 de diciembre del 2015 hasta ahora tengamos 11 mil presos más», dijo.
Luego, agregó que la obligación de la policía provincial «es hacer este trabajo que estamos haciendo, de saturación, de retenes, que hace que muchos fines de semana tengamos más de 800 detenidos y que 400 de esos detenidos estén vinculados al narcotráfico».