El presidente de la Corte Suprema, Carlos Rosenkrantz, denunció este viernes que es víctima de una «burda operación», tras un WhatsApp anónimo donde se acusa al miembro del máximo tribunal de tener cuentas en Panamá y otros países, en tanto que solicitó al juez federal Ariel Lijo que avance con medidas para investigar la situación.
El integrante del máximo tribunal de justicia se presentó, en el marco de la causa nro. 9347/2019 del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal nro. 4, Secretaría nro. 8, tras tomar «conocimiento de la existencia de esta denuncia en la que se me acusa, con absoluta falsedad y ninguna evidencia que lo avale, por la (supuesta) utilización de sociedades off-shore y por la titularidad de cuentas bancarias en paraísos fiscales, en las que, se alega, habría canalizado sobornos judiciales procurados desde octubre de 2018 tras asumir como Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación».
Según reza la presentación de Rosenkrantz, «en noviembre y diciembre de 2019 lo denunciado se comunicó masivamente de modo anónimo vía Whatsapp y mensajes de texto con un link a una página Web que sigue operativa».
El presidente de la Corte asegura que «la acusación también fue enviada de modo anónimo y difamatorio a distintos medios de comunicación y a todas las fiscalías federales desde la casilla de correo justicia-leaks44@protonmail.com».
Rosenkrantz requirió a Lijo que avance con la investigación pues «la denuncia que se formula es absolutamente falsa. No tengo cuentas bancarias ni sociedades en paraísos fiscales. No soy el propietario ni el beneficiario de las cuentas que falsamente se me atribuyen. Nunca intenté cobrar ni cobré soborno alguno. Todo mi patrimonio está íntegramente declarado», indicó el miembro de la Corte.
Además, formuló que «la denuncia tiene el solo propósito de afectar mi reputación y de hacerlo durante el tiempo más largo posible. En efecto, el atribuirme el burdo hecho de haber abierto a nombre propio 71 cuentas en distintas jurisdicciones seguramente responde a la aspiración del anónimo denunciante de mantener abierta esta causa durante un tiempo prolongado».
El juez Lijo ya había ordenado las primeras medidas de prueba el 27 de febrero, cuando pidió a través de la Cancillería que Panamá envíe datos de la empresa The International Food, y si tanto esa firma como Rosenkrantz y Gabriel Bouzat tienen cuentas bancarias a su nombre en ese país. También se pidieron datos de cuentas en Shangai y Hong Kong.
Desde el año pasado, Rosenkrantz viene siendo blanco de una seguidilla de supuestas noticias respecto a distintas irregularidades en su gestión, por parte de sitios web y canales de noticias directamente vinculados con el kirchnerismo.
El juez fue rechazándolas todas, e incluso la Corte en su conjunto desmintió una información publicada en el portal El Cohete a la Luna, de Horacio Verbitsky, respecto a un supuesto plan para contratar sin licitación un sistema informático para el Poder Judicial.