El gobierno bonaerense reglamentó hoy la legalización del juego online aprobada en diciembre pasado en la Legislatura, una medida que fue centro de fuertes críticas por parte de la oposición y de la Iglesia, en el marco del proyecto de Ley Fiscal e Impositiva.
La medida fue publicada este viernes en el Boletín Oficial, y alcanza a las máquinas electrónicas de juegos de azar; juegos de casino; loterías; apuestas sobre juegos virtuales (con exclusión de los juegos de lotería); apuestas hípicas y apuestas sobre eventos reales, deportivos y no deportivos (siempre que no sean de carácter político).
«La normativa indicada regula una situación existente, dada por la infinidad de sitios de internet no autorizados, a través de los cuales se captan apuestas de juegos de azar», reza la normativa.
Y amplía: «El avance de los servicios tecnológicos y los medios de comunicación, facilitan la difusión y el consecuente acceso a dichos sitios de internet, impidiendo dimensionar la oferta, obstaculizando las medidas de control ineludibles de tutela que garanticen el orden público».
En tanto, de acuerdo al Anexo que acompaña la resolución, no se reglamentó el artículo que legisla las «regulaciones» y «prohibiciones».
Por otra parte, la Provincia aseguró que se otorgará hasta siete licencias, «no pudiendo adjudicar más de una por licenciatario» y para hacerlo se deberá previamente inscribir en el registro.
Será una comisión evaluadora la que finalmente aprobará o no la licencia, teniendo en cuenta 20 requisitos mínimos, entre los que se destaca la experiencia, la solvencia financiera y técnica, seguridad de datos, cantidad de eventos y deportes, entre otros puntos.
Las empresas que operen las licencias tienen que pagar cerca de un cuarto de su facturación que se compone a partir de un 15% de Ingresos Brutos, un 8% de un tributo específico por la actividad, y un 2% del canon.
La legalización del juego online generó en diciembre un contrapunto entre la Iglesia y el Gobierno de María Eugenia Vidal, que interrumpió la «buena sintonía» entre las partes. También fue foco de críticas de la oposición.
A través de un duro comunicado, la Comisión Nacional de Pastoral de Adicciones de la Conferencia Episcopal Argentina, advirtió que la norma tendría consecuencias en las familias más humildes en el marco de la crisis económica y que convierte «a cada casa en un casino».
En tanto, desde la administración bonaerense, se defendieron al enumerar una serie de medidas tomadas para combatir el juego, y argumentaron que la apuesta online es una práctica difícil de controlar y combatir, que además no tributa impuestos, lo que es «injusto» para el resto de las actividades económicas.