Ocho bombas Molotov fueron halladas este viernes por la mañana en el interior de un taxi quemado y abandonado en el barrio porteño de Constitución, donde trabajan efectivos de Gendarmería Nacional.
Fuentes de esa fuerza informaron que el hallazgo se produjo cerca de las 11, cuando se advirtió la presencia de un taxi quemado y abandonado en la avenida Bernardo de Irigoyen y Cochabamba.
En el interior del rodado se encontraron artefactos incendiarios, fabricados con botellas con mechas caseras, que fueron secuestrados por los efectivos que llevan adelante el operativo de seguridad en la ciudad de Buenos Aires.
El auto quemado no estaba abandonado: es un taxi quemado que espera en una parada. Un vecino del lugar aseguró que el vehículo «se incendió hace varios meses» y que «lo tienen ahí esperando a que venga el seguro».
No hay detenidos por el hallazgo, que habría sido hecho en un control de rutina. Las botellas estaban en un bolso. Fuentes en el procedimiento afirman que los testigos convocados «no firmaron por la apertura del bolso en el acta» sino por la presencia de las botellas mismas en una mesa.
Se investiga si los artefactos explosivos tenían como objetivo ser utilizados durante la marcha opositora al G20 para provocar destrozos. Desde el Ministerio de Seguridad aseguraron que las bombas «estaban preparadas para la marcha» y que se comunicaron con los organizadores de la movilización para informarles el hallazgo.
Unas 80 agrupaciones nacionales e internacionales marcharán en repudio del G20 y tomarán un camino que se topará con el dispositivo de seguridad dispuesto por el Gobierno. Es que los manifestantes le dijeron al Ministerio de Seguridad que querían movilizarse por la 9 de Julio y doblar en Avenida de Mayo para llegar al Congreso.