Guatemala retomó hoy los arriesgados operativos de rescate en la zona caliente y devastada por la erupción del volcán de Fuego en el sur del país, suspendidas la víspera por las lluvias, mientras la cifra de los muertos superó el centenar.
Según la agencia internacional AFP, cientos de socorristas, policías y soldados se adentran a la zona de impacto solo con sus equipos, muchos no apropiados, con palos, piochas y palas para buscar entre toneladas de ceniza y piedras a los desaparecidos en la comunidad de San Miguel Los Lotes.
El volcán, de 3.763 metros de altura y situado a 35 km al suroeste de la capital, registró el domingo su erupción más fuerte en las últimas cuatro décadas que ha dejado desde ese día al menos 109 muertos y 197 desaparecidos, según datos de la Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred).
La furia desatada por el volcán dejó además 158 personas heridas y 12.277 evacuadas, de las cuales 3.665 fueron llevadas a 21 albergues, según el último balance divulgado por la Conred, ente estatal a cargo de protección civil.