Un bebé de un año fue internado en el hospital de Berisso por un cuadro de intoxicación con cocaína. El pequeño fue llevado hasta la guardia por su papá, quien en principio dijo que el nene estaba descompuesto.

Los estudios de orina confirmaron que el nene tenía rastros de esa sustancia en su cuerpo. Según fuentes oficiales, el papá contó en el hospital que tanto él como la mamá del niño eran adictos a la cocaína e investigan si fue transmitida al bebé a través de la leche materna o si la consumió de alguna otra forma.

Ambos padres fueron detenidos por
«abandono de persona agravado».
De esta manera, los acusados podrían
ser 
condenados a seis años de prisión.

Por tratarse del consumo de sustancias prohibidas, ambos padres fueron detenidos por «abandono de persona agravado». De esta manera, los acusados podrían ser condenados a seis años de prisión. Fuentes judiciales explicaron que, para el fiscal, los padres -que serán indagados hoy- «pusieron en riesgo la salud del bebé por no darle los cuidados necesarios». Por el momento, la investigación no pudo determinar si el bebé «ingirió la cocaína de manera accidental o le fue suministrada por los padres», y que en ese último caso «la carátula se agravaría».

Por su parte, el jefe del Hospital Mario Larraín de Berisso, Alfredo Zannaroni, aseguró que la víctima se encuentra «fuera de peligro».