La cifra de muertos por el fuerte terremoto del pasado fin de semana en la isla indonesia de Lombok aumentó hoy a 131, al encontrar los equipos de rescate a más personas aplastadas bajo edificios derrumbados, aunque algunos seguían con esperanzas de encontrar supervivientes.

«No sabemos con seguridad cuántas personas siguen vivas bajo los escombros», dijo Sutopo Purwo Nugroho, portavoz de la agencia de gestión de desastres de Indonesia BNPB a periodistas en Yakarta. «Es un momento crítico para la evacuación inmediata», añadió.

BNPB había estimado previamente el número de muertos en 105, dos de ellos en la isla vecina de Bali, que también sintió el terremoto de 6,9 grados de magnitud. Sutopo dijo que la cifra seguiría creciendo.

Lombok ya había sufrido un terremoto de 6,4 grados de magnitud el 29 de julio que mató a 17 personas y dejó atrapados brevemente a varios cientos de excursionistas en las laderas de un volcán.

Indonesia se encuentra en el Anillo de Fuego del Pacífico y sufre terremotos con frecuencia. En 2004, el tsunami del Océano Índico mató a 226.000 personas en 13 países, más de 120.000 de ellas en Indonesia.

Miles de turistas han abandonado Lombok desde el domingo, por temor a nuevos terremotos, algunos en vuelos adicionales gestionados por aerolíneas y otros en ferries a Bali.