Un hombre de 44 años con problemas psiquiátricos tomó de rehen a un amigo suyo de 53, en La Plata. Luego de tres horas de negociaciones, la policía logró liberar a la víctima y detener al agresor, quien ya había irrumpido en una casa de Tolosa por la mañana y también había sido detenido por ese hecho.
El episodio comenzó esta tarde a las 17.38 cuando el delincuente, identificado como Pedro Vancella, de 44 años, ingresó a la vivienda de 6 entre 36 y 37 y se enfrentó con el dueño de casa y conocido suyo, Mauricio Sasenrino (53), por un tema personal.
Alertados por los gritos, vecinos de esa cuadra llamaron al 911 y poco después se estableció un perímetro policial del que participaron efectivos de la comisaría Segunda , la DDI, Distrito Centro, Departamental, Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) y Grupo Halcón, que encabezó las negociaciones con el agresor bajo las instrucciones de la fiscal Leila Aguilar y el juez Guillermo Atencio.
“La negociación se basó en el desgaste de esta persona para que desistiera de su actitud”, dijo una alta fuente del operativo. Mientras tanto, Vancella lanzaba pedidos distintos. Primero fue la presencia de los medios, por lo que las autoridades le pidieron a un reportero gráfico de este diario (el primero en llegar) que permaneciera apostado a pocos metros. Y luego solicitó la presencia de su hijo de 18 años, aunque esto terminó “volviéndolo más agresivo”, explicó la misma fuente.
Finalmente se presentó en la escena un amigo de Vancella, quien lo convenció de entregarse. Apenas soltó a la víctima y salió con los cuchillos, amenazando todavía con autolesionarse, lo redujeron policías del grupo Halcón. Eran casi las 9 de la noche. Sasenrino fue derivado al Rossi preventivamente y Vancella a la Segunda. Científica secuestró los cuchillos para peritarlos.
Más tarde se supo que Vancella había estado demorado en la comisaría sexta esa misma mañana, después de que lo descubrieron en el patio trasero de una casa de 4 entre 521 y 522. La dueña de la propiedad aclaró que no lo conocía. Estaba descalzo, pero con medias, y con el torso desnudo. “No había robado nada y aparentemente tampoco intentó hacerlo”, aseguró un jefe policial. Lo ficharon por “violación de domicilio” y recuperó la libertad, horas antes de meterse en la casa de su amigo y amenazarlo.
También se supo que Vancella había salido el viernes de un neuropsiquiátrico, lugar a donde este lunes debía regresar.