El presidente auto-proclamado de Venezuela, Juan Guaidó, destacó el papel «fundamental» del Ejército en la «transición» para desplazar del poder al presidente Nicolás Maduro durante una jornada marcada por las marchas antichavistas a los cuarteles y por una emboscada a militares y policías en el centro norte del país sudamericano que dejo seis muertos. Guaidó buscó hoy intentó aprovechar el descontento en las Fuerzas Armadas Nacional Bolivariana (FANB) para provocar una ruptura pero la participación ciudadana a su convocatoria fue por demás discreta.
«Nuestra visión es que la Fuerza Armada cuente con capacidades de primera línea», subrayó Guaidó. «La situación política, social y económica de nuestro país es insostenible y demanda cambios estructurales urgentes. Para acometer esta tarea histórica, el rol de la institución militar es fundamental», agregó en un comunicado. Guaidó prometió «un mejor futuro» para los militares y emplazó a la Fuerza Armada a «ponerse del lado de la Constitución», reportó el diario El Universal.
Este es el deseo de un pueblo que hoy se movilizó de forma cívica, pacífica y firme para decirle a su Fuerza Armada que llegó el momento de manifestarse a favor del cese de la usurpación, la transición y las elecciones libres. #UnidosXVzla pic.twitter.com/G60Nl0kgdm
— Juan Guaidó (@jguaido) May 5, 2019
Durante la jornada de ayer, poco más de un centenar de venezolanos marchó hacia los principales cuarteles del país para exigir a la Fuerza Armada que cese su apoyo al presidente Maduro, tras el fallido alzamiento del martes. Los manifestantes entregaron una proclama en la que piden a los militares respaldar un gobierno de transición encabezado por Juan Guaidó, reconocido como mandatario interino de Venezuela por más de 50 países.
Por su parte, en un confuso episodio cuatro militares, entre ellos un general, y dos policías fueron asesinados hoy por desconocidos en el estado de Aragua. Los primeros informes del caso señalan que los militares y los policías fueron víctimas de una emboscada, debido a que habían sido convocados para actuar tras un «atentado terrorista» en la zona. Los informes no incluyen ningún detalle acerca de los agresores, las armas que utilizaron ni si alguno de ellos resultó herido o muerto.