En medio de las críticas del oficialismo a la movilización del próximo 21, que incluye una serie de auditorías en 80 sindicatos, el secretario general del gremio de Camioneros, Pablo Moyano, aseguró que la convocatoria «será multitudinaria» y dijo que espera que el presidente Mauricio Macri «entienda que no se puede seguir gobernando para un solo sector».
«El 21 hay que salir a la calle y demostrar que no vamos a abandonar la lucha», remarcó Moyano y agregó que la movilización ya «sobrepasó la pelea de los camioneros».
En el barrio porteño de La Boca, junto al titular de UTE- Ctera, Eduardo López, el hijo de Hugo Moyano indicó: «El 21 miles de trabajadores vamos a decirle al gobierno basta de ponerle techo a las paritarias, basta de despidos, de seguir perjudicando a los jubilados, de impuesto a las ganancias».
Pese a las múltiples deserciones, entre ellas las de los encargados de edificios, con Victor Santa Marina a la cabeza, y los otros gremios, Moyano podrá hacer ante el Gobierno una demostración de fuerza, ya que a la conocida capacidad de movilización de Camioneros, se sumarán los bancarios de Sergio Palazzo (que lidera la Corriente Federal de Trabajadores).
Auditorías
En el Gobierno, sin embargo, confían en que la movilización quede focalizada en «Camioneros y grupos de izquierda» y para eso creen en que es el momento de «disciplinar».
Tras las numerosas bajas que tuvo la marcha, ahora desde el Gobierno ordenaron dar inicio a una serie de auditorías en 80 sindicatos, incluido el gremio liderado por Hugo Moyano. De esta forma, el Ministerio de Trabajo, que está al frente de la medida, solicitó los balances y transferencias del gremio a la obra social.
Desde el ministerio intimaron a Camioneros por la falta de datos suministrados para revisar las memorias, balances y movimientos de fondos con la obra social, que son las dependencias que reciben el grueso de los fondos de los gremios. A pesar de que, en el caso de este gremio la dependencia tiene un fuerte rojo, por lo que la diputada de Cambiemos Graciela Ocaña pidió su intervención, en una ampliación de una denuncia a Moyano.
Desde el Gobierno descartan que se trate de una “persecución” a las asociaciones y aseguran que se trata de darle mayor transparencia a los sindicatos y de poner en regla a aquellos que no lo están.