La operación reunió nueve cirujanos plásticos, dos urólogos y duró 14 horas, pero logró su misión: los médicos lograron el primer trasplante completo de pene y escroto del mundo.
Fue en el Hospital Universitario Johns Hopkins y el paciente que recibió el trasplante es un exmilitar estadounidense herido en la guerra de Afganistán. El centro médico explicó que, debido a los abundantes dispositivos explosivos en el conflicto, algunos combatientes volvieron a Estados Unidos tras haber perdido parte o totalidad de sus genitales.
«Estamos esperanzados de que este transpante ayudará a recuperar las funciones urinarias y sexuales casi normales de este hombre joven», dijo en un comunicado el doctor W.P. Andrew Lee, que dirige la división de cirugía reconstructiva en la escuela de medicina John Hopkins.
Los médicos no revelaron las identidades del receptor ni del donante, pero sí han dicho que las partes transplantadas vienen de un hombre que falleció y del que se extrajeron el pene, el escroto sin los testículos y una parte de su pared abdominal.
El donante mandó un mensaje a través del comunicado del hospital. Dijo que esa amputación tiene efectos mentales duros y no es fácil de aceptar. Para él, la operación ya ha significado un cambio de estado de ánimo: «Cuando me desperté, me sentí finalmente más normal, y con un nivel de confianza. Confianza de que finalmente estoy bien».
El hospital explicó que también se puede reconstruir con otros tejidos del cuerpo del mismo paciente, pero que eso no permite al herido volver a tener erecciones y que muchos veteranos ya han perdido mucho tejido cuando llegan al quirófano.
Aunque el actual sea completo y también incluye el escroto, ya en 2016 médicos en Estados Unidos condujeron el primer trasplante de pene.
El exmilitar sigue bajo la lupa de los médicos, pues el cuerpo todavía puede rechazar los genitales traspantados.