El presidente del Banco Nación, Javier González Fraga, anunció que después de unos 20 años la entidad bancaria volverá al mercado de capitales para colocar bonos en pesos, en dólares y también con el sistema UVA (Unidad de Valor Adquisitivo).

El monto global de esta colocación aun no fue precisado, ya que dependerá del interés que se obtenga del mercado, pero la licitación se realizará en la segunda mitad del 2018, según afirmó el titular del organismo, en un encuentro con la prensa en el que estuvo presente iProfesional.

El extenso plazo que aun falta para efectuarse dicha colocación se debe a «los procesos administrativos para estructurar los bonos que llevan unos seis meses de trámites«.

Esto se debe a que al no cotizar en Bolsa, el Banco Nación debe presentar balances auditados por una calificadora homologada. Trámite que le demandará un tiempo de ejecución.

 Según se precisó, el dinero obtenido de la venta de estos papeles se utilizará para el fondeo del banco para otorgar distintas líneas de financiamiento.

La emisión se realizará tanto en el mercado local como también en el exterior del país.

Además, González Fraga afirmó que se colocará un «pequeño monto» para un «bono verde», a una tasa preferencial para tareas vinculadas al cuidado del medio ambiente.

Récord de préstamos

Por otra parte, el Nación cerrará este año uno de «los mejores de su historia» en términos crediticios, con un nivel de préstamos de $54.000 millones entre el 1 de julio y el 30 de noviembre, cifra que supera ampliamente los $35.000 millones proyectados para el período, aseguró González Fraga.

«Este será uno de los mejores años del Banco Nación en su historia, como lo indica la recuperación de dos puntos en 2017 en el mercado financiero argentino, en el cual tenemos ahora una participación del 13%, con un crecimiento superior al resto del sistema», dijo el presidente de la entidad en un encuentro que mantuvo con periodistas.

El titular de la entidad destacó que el banco «ha colaborado activamente en el crecimiento del país«, mostrando su acuerdo con la política de gradualismo económico del Gobierno nacional, si bien enfatizando la necesidad del «crecimiento económico».

Al ser consultado sobre el impacto que podría tener la suba de la tasa de interés sobre la financiación y la inversión, el presidente del Nación sostuvo que «influirá muy marginalmente, pues lo importante es que después del 22 de octubre se ha generado un horizonte de largo plazo para la economía del país».