El fiscal federal Germán Moldes pidió hoy la detención del ex titular de la AFIP Ricardo Echegaray y que vuelvan a prisión los responsables de Oil Combustibles, Cristóbal López y Fabián De Sousa, al apelar el fallo que benefició a estos dos empresarios con la excarcelación.
«Así como De Vido fue el tramoyista de la obra pública estatal durante una década, Echegaray lo fue de los perdones direccionados de la AFIP en el mismo período», advirtió Moldes en la apelación, a la que accedió Télam.
El fiscal reclamó que la Cámara Federal de Casación anule el fallo de la sala I de la Cámara Federal porteña que cambió el delito a «retención indebida de aportes» y se vuelva a acusar a todos los procesados por «administración fraudulenta».
Además, sostuvo que se debe dictar prisión preventiva al ex funcionario y a los empresarios porque su libertad implica un riesgo para la investigación.
Para el fiscal se debe dictar prisión preventiva al ex funcionario y
a los empresarios porque su libertad implica un riesgo
para la investigación.
«El maridaje acreditado pone a luz la existencia de una guaranga matriz corrupta como pocas veces hemos visto y cuyas consecuencias recién ahora empezamos a dilucidar», justificó sobre ese planteo que tendrá que resolver Casación.
Ante ello el fiscal consideró que se debe «duplicar la precaución y los esfuerzos porque todo ese poder, esa ingente cantidad de fondos sustraídos de las arcas del Estado, pone a estos encartados en una posición relativamente más cómoda: la facilidad de eludir el accionar de la justicia sustrayéndose por todos los medios del progreso de las investigaciones en curso».
Y en ese contexto, analizó que el no pago al Estado de 8 mil millones de pesos, que según la AFIP ya son 17.000 millones por los intereses, fue parte de una maniobra inmersa en una «matriz» delictiva más amplia, de la cual Echegaray fue «personaje principal».
«El maridaje acreditado pone a luz la existencia de una guaranga matriz corrupta como pocas veces hemos visto y cuyas consecuencias recién ahora empezamos a dilucidar», justificó sobre ese planteo que tendrá que resolver Casación.
Ante ello el fiscal consideró que se debe «duplicar la precaución y los esfuerzos porque todo ese poder, esa ingente cantidad de fondos sustraídos de las arcas del Estado, pone a estos encartados en una posición relativamente más cómoda: la facilidad de eludir el accionar de la justicia sustrayéndose por todos los medios del progreso de las investigaciones en curso».
Y en ese contexto, analizó que el no pago al Estado de 8 mil millones de pesos, que según la AFIP ya son 17.000 millones por los intereses, fue parte de una maniobra inmersa en una «matriz» delictiva más amplia, de la cual Echegaray fue «personaje principal».