La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, confirmó este jueves que «un puñado» de funcionarios del gobierno de Bolivia ingresó a la Argentina por la frontera norte del país «como turistas», aprovechando que no hay restricciones de ingreso entre ambos países, pero evitó dar sus indentidades «por una cuestión de protección».
Luego de una reunión de gabinete, Bullrich explicó que «hemos tenido algunos funcionarios bolivianos que han cruzado a la Argentina, seguramente por las situaciones de violencia que había en sus territorios, han entrado con normalidad, han entrado solos».
La funcionaria explicó que «han decidido venirse a la Argentina seguramente para resguardarse un tiempo», agregó que se trata de funcionarios y ex funcionarios de Evo Morales, «de segundo o tercer nivel», que ya «están protegidos» en nuestro país y que «no vamos a dar las identidades por una cuestión de protección de la vida de las personas».
Al mismo tiempo fuentes oficiales confirmaron hoy el envío de personal del grupo Alacrán de Gendarmería para custodiar las embajadas ubicadas en zonas de conflicto en Bolivia y también en Chile.
En este sentido, Federico Pinedo, fue otro de los voceros de la reunión de Gabinete, y sostuvo que «en el caso de Chile vemos grupos organizados muy violentos, algunos de los cuales atacaron territorio argentino», dijo, al recordar que las sedes diplomáticas en el extranjero constituyen territorio argentino.
En el caso de Bolivia consideró que allí la situación «es muy inestable y tenemos que ser muy prudentes para tratar que eso se mantengan dentro del sistema democrático». «Somo impulsores como país de estos tres valores y del diálogo, y creemos que es esencial la paz», remarcó el senador.
«Estamos preocupados por los ataques que está sufriendo la democracia en América latina», sentenció finalmente y aseguró que el gobierno quiere «colaborar para que se estabilice el proceso democrático» en la región.