El secretario adjunto del Sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, aseguró hoy que el paro convocado por gremios opositores al Gobierno «es muy importante» y que la movilización a Plaza de Mayo será «multitudinaria», al tiempo que el ministro de Trabajo, Dante Sica, minimizó el impacto de la medida al afirmar que «no hay clima de paro».

«Hoy se está realizando esta jornada histórica, y mañana va a ser otra, ya que desde el Frente Sindical vamos a instalar 300 ollas populares en diferentes puntos del país», dijo en diálogo con El Destape Radio.

 

 

Moyano advirtió además que en los próximos meses «las protestas seguirán creciendo porque la situación económica cada vez se deteriora más», y anticipó que en los próximos días el Frente Sindical, que lidera, «volverá a reunirse para evaluar nuevas medidas de protesta».

También dijo que espera que tanto las marchas como el paro se realicen en «paz» y, en ese sentido, dijo será el Gobierno «responsable de cada acto de violencia, porque hace una semana que están tratando de meterle miedo a la gente para que no pare”.

El dirigente camionero también pidió al Gobierno que «reaccione y escuche y empiece a darle algo a los trabajadores de todo lo que le ha sacado. La inflación está desbordada y los que más pagan son los trabajadores, los jubilados y los que no tienen trabajo”.

También respondió las críticas del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, que acusó de la medida a la familia Moyano, al afirmar que “personificar una medida de fuerza en los Moyano cuando convocan más de 70 organizaciones sindicales es una muestra de su propia soberbia, y de que hacen lo que les dice el FMI”.

Por su parte, el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, minimizó hoy la medida de fuerza al considerar que «cuando pasan estas cosas es que no hay una sensación de paro, no hay un clima de paro, de querer hacer alguna medida, porque el trabajador sabe que estamos en una situación difícil».

El funcionario, además, aseguró que «hoy el trabajador está cuidando su fuente de trabajo, es un momento difícil y no quiere perder su presentismo. Más que un paro, estamos ante una gran movilización, y estamos viendo que el grado de acatamiento está relacionado con el transporte, y el transporte urbano funciona en un 85 por ciento».