El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, advirtió al presidente venezolano, Nicolás Maduro, que Washington no cederá en su «lucha por la democracia», rechazó el apoyo de Rusia y Cuba a Caracas y aseguró que el final del gobierno chavista está «cada vez más cerca».

«Cada minuto, cada hora, es un paso más para acercarnos a la salida de Maduro», dijo Pompeo en una entrevista concedida a la agencia de noticias EFE en el puente de Tienditas, que une Colombia y Venezuela, con motivo de su visita al paso fronterizo de Cúcuta, parte de su gira por la región que incluye Chile, Paraguay, Perú y Colombia.

En su visita de cerca de tres horas, el jefe de la diplomacia estadounidense recorrió un albergue instalado por el gobierno colombiano para los venezolanos que huyeron de su país por la crisis. También se acercó al puente Simón Bolívar, principal cruce entre ambos países y donde conversó con refugiados, antes de culminar su estancia en unas bodegas donde se almacenan cientos de toneladas de ayuda para el vecino país.

Allí, Pompeo recordó que la administración estadounidense impuso múltiples sanciones políticas y económicas al gobierno de Maduro, a empresas controladas por el gobierno venezolano, a funcionarios, militares y otras personas vinculadas a su entorno. «Estados Unidos continuará utilizando toda vía económica y política a nuestra disposición para ayudar a los venezolanos a través de sanciones, cancelaciones de visas y otros medios», advirtió Pompeo, quien dijo esperar que aquellos que ayudan a sostener al régimen bolivariano «se hagan responsables por la corrupción y la represión de la democracia».