Santiago del Estero se cobró la tercera vida en lo que va del año de una mujer que murió por una infección generalizada como consecuencia de realizarse un aborto clandestino en condiciones inseguras.
Se trata de Liliana Herrera, de 22 años y quien tenía dos hijos. La mujer llegó el viernes a la guardia del hospital regional de la capital provincial, desde el pueblo Las Lomitas, del departamento de Loreto, con un cuadro de infección generalizada luego de realizarse un aborto.
«Le hicieron una histerectomía (extracción del útero). En el quirófano sufrió varios paros cardiorespiratorios y la pasaron a terapia intensiva, donde murió anoche», contó Teresa Santillán, médica de una unidad primaria de atención de Santiago del Estero e integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
El grave hecho se da en medio del debate de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y a tres días de que el Senado de la Nación vote el proyecto para legalizar la práctica, que hoy se realiza en el país de manera clandestina.
Uno de los reclamos para aprobar la ley es que las mujeres que mueren son aquellas que lo practican en condiciones insalubres, mientras que otro sector puede hacerlo hasta en clínicas privadas que los realizan a elevados precios.
Liliana es la tercera mujer que pierde la vida en el hospital regional de Santiago, durante el 2018, a causa de un aborto clandestino. Antes, en febrero, murió María Campos, de 37 años, madre de seis hijos. Según se supo María, al igual que Liliana, era pobre, no quería tener otro hijo y se hizo un aborto con una sonda.
“En Santiago del Estero estamos en un escenario del terror. La hipocresía se apoderó de nuestra sociedad. El senador y las dos senadoras anunciaron su voto a favor del aborto clandestino. Mientras, recibimos la visita de Abel Albino anunciando el lanzamiento de un programa nutricional», disparó Cecilia Canevari, docente e investigadora del grupo Géneros, Política y Derechos del INDES de la Universidad Nacional de Santiago del Estero e integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
«No logramos que el Ministerio de Salud apruebe el protocolo para la atención de abortos no punibles, ni la aplicación de la Educación Sexual Integral en las escuelas y la Iglesia presiona fuertemente sobre funcionarios y legisladores”, explicó Canevari.
El próximo miércoles tendrá lugar en el Senado una histórica sesión donde se debatirá el proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo. Las cuentas están parejas. Sin embargo, el rechazo al aborto legal tendría una pequeña ventaja.