El candidato presidencial de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, se impuso con el 55,69% de los votos sobre el postulante de Unión por la Patria (UXP), Sergio Massa, quien obtuvo el 44,30%, escrutado el 99,28 por ciento de los sufragios, de acuerdos con cómputos oficiales del conteo provisorio. De esta manera, Milei se consagró como presidente electo y asumirá el 10 de diciembre próximo.
El libertario deberá articular un equipo, un discurso y un plan de acción. Además, deberá contrarrestar el miedo que se sembró en torno a su persona y sus propuestas. En esta segunda vuelta, cosechó el aporte rotundo de Córdoba, una clara ventaja en CABA y una virtual paridad en Buenos Aires, los distritos que, junto con Santa Fe, concentran el 60% del total de votantes del país.
Con una muy buena performance electoral en el interior del país -especialmente en las provincias de Mendoza (71% de los votos) y Córdoba (74,14%)-, el economista ganó la votación mucho más holgadamente de lo que habían presagiado las encuestas los días previos.
Sin embargo, la sorpresa fue la provincia de Buenos Aires, donde el oficialismo no logró los resultados esperados. Con el 92,96% de las mesas escrutadas, el peronismo se ubicaba apenas un punto y medio por encima de los libertarios. En ese distrito, el partido opositor barrió con las especulaciones de fraude e irregularidades al diseñar un operativo de fiscalización que funcionó a la perfección.
Hubo otras provincias en donde Unión por la Patria esperaba otros números y terminaron inclinándose a favor del libertario. De hecho, Massa ganó sólo en Formosa y Santiago del Estero además de Buenos Aires. Milei celebró en Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut, Río Negro, Neuquén, La Pampa, CABA, San Juan, Mendoza, Catamarca, La Rioja, Tucumán, San Luis, Salta, Jujuy, Chaco, Córdoba, Entre Ríos, Corrientes, Misiones y Tucumán.
A partir del 10 de diciembre próximo, Mieli y Villarruel reemplazarán en el Ejecutivo nacional a Alberto Fernández y a Cristina Fernández de Kirchner y darán forma a una gestión ultraliberal que contará con el aporte de exfuncionarios y asesores del Gobierno de JxC, incluso del propio exmandatario Mauricio Macri y de la excandidata presidencial Patricia Bullrich.
Creador del frente La Libertad Avanza (LLA) y debutante en una carrera presidencial tras haber cumplido medio mandato de diputado, Milei irrumpió en la política en el 2021 con el envión que le habían dado algunos espacios de TV, donde defendió el anarcocapitalismo y empezó a dar forma a su discurso anticasta, en el que apoyó su aspiración de llegar a la Casa Rosada.
Esos los resultados astillaron los acuerdos partidarios puertas adentro de JxC, con el apoyo unilateral de un sector del PRO -alineado con Bullrich y con el expresidente Mauricio Macri- al postulante partidario y el enojo del resto de los miembros de la coalición: la UCR y la Coalición Cívica (CC). Sin embargo, pese a las críticas de un sector, ese acuerdo terminó siendo clave para el triunfo del libertario en la segunda vuelta.
«Hoy comienza la reconstrucción argentina; no hay lugar para gradualismo»
El candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, se impuso en el balotaje por más de 11 puntos sobre Sergio Massa, señaló que a partir de ahora “comienza la reconstrucción de Argentina” y en un mensaje sin muchas definiciones aseguró que “no hay lugar para gradualismo” debido a la crisis que atraviesa el país.
En un mensaje desde su comando de campaña, Milei señaló que la de hoy “es una noche histórica” y agradeció a su hermana y a Santiago Caputo, el estratega de La Libertad Avanza, como “al equipo que viene acompañando hace dos años para lograr tener un presidente liberal libertario”.
También reconoció el trabajo de los fiscales, y valoró el apoyo de PRO, su nuevo aliado. “Le agradezco al presidente Macri y a la señora Bullrich que pusieron el cuerpo para defender el cambio que el país necesita. Hoy comienza el fin de la decadencia, damos vuelta de página”, señaló.
“Quiero un gobierno que cumpla sus compromisos, que respete a la propiedad privada y el comercio libre. Basta del modelo empobrecedor de la casta”, planteó Milei, y abrió una puerta a otras fuerzas y dirigentes a sumarse a su proyecto. “Sabemos que hay gente que se va a resistir, hay gente que quiere mantener este sistema de privilegios para algunos y empobrece a la mayoría de los argentinos. A todos ellos quiero decirles que dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”, desafió, con tono más mesurado que otras veces. Al respecto, siguió: “Vamos a ser implacables con aquellos que quieran utilizar la fuerza para defender sus privilegios”.
Inmediatamente, Milei le envió un mensaje al Gobierno y dejó en claro que comenzará su gestión con fuertes medidas: “Al Gobierno, que sean responsable, que se hagan cargo hasta el final del mandato el 10 de diciembre. Una vez finalizado el mandato podamos comenzar a transformar esta realidad trágica. La situación es crítica, los cambios que se necesitan son drásticos, no hay lugar para gradualismos, medias tintas”.
En ese sentido, enumeró la inflación, la pobreza, la indigencia y la inseguridad como los desafíos más urgentes. “Argentina tiene futuro y es liberal”, señaló Milei, que prometió que en 35 años el país será “una potencia mundial”.