Efectivos de la nueva Guardia Nacional de México comenzarán a desplegarse hoy en el sur del país para colaborar en el control de la inmigración, en cumplimiento de un acuerdo con Estados Unidos que evitó la imposición de aranceles a importaciones mexicanas.

En conferencia de prensa, el presidente Andrés Manuel López Obrador y su canciller, Marcelo Ebrard, revelaron también que una comisión de cinco personas, entre ellas un general del Ejército y un director del servicio penitenciario, fue formada para atender el tema migratorio y lograr resultados en el plazo convenido con Estados Unidos.

Ebrard dijo que el general Vicente Antonio Hernández Sánchez, comandante militar de la zona de Tapachula, iniciará una recorrida por el Sur «para acelerar el despliegue en el área» de los primeros de los 6.000 efectivos de la Guardia Nacional que México se comprometió a acantonar en la zona en el marco del acuerdo con Estados Unidos.

El principal objetivo de los guardias será colaborar con las autoridades migratorias para registrar a los migrantes, ofrecerles opciones para regularizar su condición de indocumentado y retornar a sus países de origen a aquellos que no quieran registrarse, agregó el canciller, según informó la agencia de noticias mexicana Notimex.

Otro grupo de guardias nacionales irá a la frontera norte, el límite con Estados Unidos para atender a los migrantes que hayan sido regresados a México mientras se procesan sus solicitudes de asilo en los tribunales estadounidenses.

Tras una semana de negociaciones, ambos países llegaron a un acuerdo el viernes pasado que evitó aranceles a las importaciones mexicanas que el presidente Donald Trump había amenazado con imponer si el país vecino no frena el avance por su territorio de migrantes centroamericanos que se dirigen a Estados Unidos.