El ministro de Economía, Martín Guzmán, sostuvo este lunes que “la salud es la prioridad número uno” en la estrategia mundial para contener el avance del coronavirus y pidió inyectar dinero a la gente para afrontar la crisis generada por la pandemia.
«Podremos enfrentar esta crisis si actuamos juntos con decisión. El primer principio es que la salud es la prioridad número uno”, indicó Guzmán al hablar ante los ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20, que se reunieron esta mañana vía videoconferencia para analizar y buscar soluciones coordinadas para responder al coronavirus.
El ministro advirtió que se vive “una crisis económica y de salud global masiva de una magnitud que nadie podría haber previsto hace solo unos meses”, y afirmó que “la economía de mercado global no estaba preparada para enfrentar las consecuencias del COVID-19, y es de suma importancia que profundicemos los esfuerzos de coordinación y cooperación global tanto como sea posible para preservar la estabilidad social global”.
Según el funcionario, la respuesta global ante la caída económica debe apuntar, fundamentalmente, “a proteger a quienes son, o se vuelven, vulnerables”. “Los cambios en la composición de la demanda, sin intervenciones políticas, están llevando a situaciones de desesperación para muchos. Debemos actuar con decisión para evitar un colapso social”, afirmó.
Estamos frente a una emergencia mundial que requiere de políticas coordinadas valientes y contundentes. La prioridad es la salud y proteger a los más vulnerables.
En la reunión del #G20 planteé que la respuesta global debe basarse en cinco principios👉🏼https://t.co/YN0rl9bgeb pic.twitter.com/SPupBlN0QX
— Martín Guzmán (@Martin_M_Guzman) March 23, 2020
En ese sentido, afirmó que “hay tres formas de abordar esta necesidad: “proporcionar transferencias de efectivo; proteger el empleo mediante subsidios de empleos en sectores que están gravemente afectados por la crisis; y proporcionar extensiones del seguro de desempleo”.
Guzmán habló también de la necesidad de “preservar el capital organizacional – conocimiento – integrado en las empresas en curso”, lo que diferenció de “proteger las ganancias o los accionistas”. También afirmó que “la investigación para enfrentar la crisis de COVID-19 debe ser un bien público global”.
Por último, dijo que es necesario “utilizar todo el conjunto de herramientas de las políticas económicas para proporcionar liquidez global” y pidió que haya “extensiones de los intercambios bilaterales con las economías avanzadas, así como aumentos en los derechos especiales de giro”.
“Esta es una emergencia global que requiere políticas globales audaces y decisivas. Argentina está lista para ayudar al mundo a navegar por estos tiempos difíciles. Podremos enfrentar esta crisis si actuamos de manera decisiva juntos”, cerró Guzmán su ponencia.