El ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó este jueves que «Argentina necesita un alivio sustancial» por parte de los acreedores en la reestructuración de los US$ 68.843,52 millones de deuda pública que tiene el país.

El funcionario advirtió que no se aceptará ninguna oferta “que no sea sustentable” para la Argentina. En ese sentido, acotó que cualquier acuerdo tendría que evitar más austeridad fiscal en una economía argentina ya golpeada por la recesión.

“Hay necesidad de un alivio sustancial”, subrayó Guzmán, en una entrevsta reproducida en el sitio web de la agencia Reuters, al tiempo que puntualizó que “si alguien piensa que vamos a patear la pelota de una manera que obligue a otra reestructuración más adelante, deberían pensarlo de nuevo, porque no vamos a hacer eso”.

El funcionario señaló que se está trabajando en una propuesta que “maximice la aceptación de los acreedores”, y remarcó que “ahora estamos en una situación de emergencia global que requiere que todas las partes sean flexibles”.

En ese marco, indicó que si se extiende el plazo para cerrar un acuerdo será “solo por unos días”.

Además puso de relieve: “Nos estamos quedando sin las reservas que el Tesoro puede utilizar para el servicio de la deuda. Por lo tanto, debemos resolver este problema rápidamente”, sostuvo Guzmán.

Los funcionarios económicos argentinos se reunieron con los tenedores de bonos a principios de este mes, mientras continúan las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que le otorgó préstamos al país por 44.000 millones de dólares tras un acuerdo en 2018.