El presidente Mauricio Macri y la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, almorzaron este viernes en la Quinta de Olivos con los dirigentes y legisladores provinciales de Cambiemos denominados «sin tierra», que en octubre disputarán las intendencias que gobierna el peronismo.

Vidal dijo que «no nos achicamos» ante el desafío electoral de los comicios de octubre y pidió que los dirigentes de Cambiemos «defiendan con convicción cada cosa que hicimos», al hablar ante referentes políticos que se postulan como candidatos a intendentes en la provincia de Buenos Aires.

La gobernadora remarcó  que «no es lo mismo pelear en la Provincia que en otro lado», al reflexionar sobre las problemáticas que tiene su distrito.

La mandataria le pidió a los dirigentes bonaerenses que muestren «coherencia y perseverancia» en la campaña electoral en el territorio bonaerense y argumentó que «la Provincia es el distrito más difícil del país y estamos peleando contras muchas décadas de fracaso» de las gestiones anteriores.

Por su parte, el presidente Macri afirmó que el Gobierno debe “persistir” en el rumbo de sus políticas porque advirtió que si no lo hace “Argentina corre riesgo de volverse a caer del planeta”.

Asimismo, definió a la coalición Cambiemos que integran el PRO, el radicalismo y la Coalición Cívica, como “la vinculación que tiene el país con el mundo”.

“Necesitamos persistir porque, si hacemos lo contrario, la Argentina se vuelve a caer del planeta. El mundo aprieta un botón y nos desconecta. Hoy la vinculación del país con el mundo es Cambiemos”, señaló Macri durante la reunión los dirigentes oficialistas bonaerenses.

Al almuerzo asistieron representantes del PRO, el radicalismo y la Coalición Cívica, junto al jefe de Gabinete, Marcos Peña; su par bonaerense, Federico Salvai; el ministro de Educación y referente de La Matanza, Alejandro Finocchiaro, y la senadora nacional y aspirante a competir en Avellaneda, Gladys González, entre otros.

Antes, Macri y Vidal recorrieron las obras de ampliación que se están realizando en el Hospital Zonal General Doctor Posadas, en la ciudad bonaerense de Saladillo, y que forman parte de un plan de remodelación de centros de salud provinciales.

La obra incluye la construcción de una guardia para emergencias que tendrá mayor capacidad operativa y que contará con un área crítica con cuatro shock-room, dos para chicos y dos para adultos, más sus respectivas salas de observación.