Ante cientos de empresarios, el presidente Mauricio Macri apuntó este viernes contra los Moyano padre e hijo, líderes de los camioneros, aunque sin nombrarlos: «No podemos tener un sistema mafioso en el transporte de carga». Y, además, le dijo a su auditorio empresarial que «también tienen que dar esa pelea».
En la semana en que un juez rechazó detener a Pablo Moyano, y que su padre Hugo responsabilizó al Gobierno de presionar a Luis Carzoglio para que haga lugar al pedido de detención, Macri aprovechó el cierre del 54° Coloquio de IDEA en el hotel Sheraton de Mar del Plata, para dejar sentada su posición en el tema.
Pero además, Macri volvió a referirse al escándalo de los cuadernos de las coimas, donde el chofer Oscar Centeno relató un entramado de sobornos entre el gobierno kirchnerista. «Esos mismos empresarios de los cuadernos trabajaron con transparencia estos tres años, en los que 818 obras públicas empezaron y terminaron en plazo». Y acusó: «La corrupción tiene consecuencias: dejó a un tercio de los argentinos en la pobreza. Me vuelvo loco cuando vea a un dirigente que le miente a la gente. El populismo es muy contagioso«.
Por otra parte, el mandatario sostuvo que «estamos debatiendo con la sociedad hasta dónde tiene que llegar el cambio, la profundidad del mismo, por eso le quiero agradecer por el nivel de comprensión cuando en varios medios pronosticaban corridas cambiarias», aseguró.
«Hay más sensatez en el ciudadano de a pie que viaja al trabajo en transporte público que en la mayoría de la dirigencia política», evaluó el Presidente al hablar sobre el «cambio cultural» en la Argentina.
«La competitividad, la productividad, son todo, porque esas cosas generan empleo de calidad para cada uno de los argentinos. Eso es lo que la dirigencia tiene que terminar de entender», insistió.
La mesa de cierre del 54° Coloquio de Idea contó con la moderación de Rosario Altgelt, responsable de esta edición del evento y gerente general de LATAM Airlines Argentina; y Javier Goñi, titular de la organización y CEO de Ledesma.