El aumento de la tarifa del agua potable en la provincia de Buenos Aires podría ser del 40%, si el Ejecutivo bonaerense rubrica la propuesta que hizo ayer la empresa estatal Aguas Bonaerenses (ABSA), durante la audiencia pública que se realizó en el Colegio de Abogados de La Plata, donde la Defensoría del Pueblo rechazó la suba del servicio.

El titular de ABSA, Rafael Sardela, defendió el aumento con gráficos en los que mostró la situación que se encontró en la empresa de la que se hizo cargo el Estado en 2002 y que «hasta 2015 tuvo solo pérdidas», señaló.

Sardela no sólo expuso el estado de situación sino también los planes de la empresa, entre los que mencionó obras de infraestructura e incorporación de tecnología para superar los problemas de arsénico, nitratos y sales que presentan algunos distritos del norte y el oeste de la provincia. Y para poder financiarlos, propuso un aumento de 40% en las tarifas.