El gobierno de Axel Kicillof le ofreció un amento de 16,66% en dos cuotas a los docentes bonaerenses, en el marco de la paritaria provincial que se llevó a cabo este jueves, y los gremios darán una respuesta mañana.

Los secretarios generales de los gremios que integran el frente -Suteba, Feb, Udocba, Amet y Sadop- quedaron en responder mañana después de que lo pongan a consideración de las bases.

Según trascendió, la primera suba ofrecida para marzo es de 8,9% y la segunda para junio de 7%. Según las cifras oficiales, con la oferta realizada, el salario de bolsillo de un maestro de grado de jornada simple sin antigüedad pasaría de $26.623 a $29.000 en marzo y asciende a $31.058 en junio. En tanto, para un docente con 24 años de antigüedad se elevaría de $35.960 a $39.117 en marzo y $42.003 en junio.

A su vez, el gobierno bonaerense se comprometió a reabrir la mesa salarial en caso de que la inflación que se registre supere el aumento ofrecido.

“La propuesta se llevó a cabo en un marco de diálogo y negociación constructiva con los gremios docentes. El objetivo es que el salario docente no pierda poder adquisitivo”, dijeron desde la administración bonaerense.

Más allá de que el diálogo entre las partes es fluido, algunos sindicatos, como la Feb, advirtieron que, en base a las reacciones de los docentes, definirán “si comienzan o no” las clases el próximo lunes.

El inicio de los últimos tres ciclos lectivos se demoró en la provincia de Buenos Aires por el conflicto salarial que los sindicatos mantenían con la ex gobernadora María Eugenia Vidal.

La reunión de hoy llegó un día después del acuerdo en la paritaria federal, que se selló ayer entre el Gobierno y los gremios de alcance nacional. En el acta, se fijó el piso salarial de los docentes argentinos -que está en 20.250 pesos- en 23 mil desde marzo y luego en 25 mil desde julio. Desde Nación aportarán, además, cuatro sumas fijas de 1.210 pesos por única vez. Una en marzo, una en abril, una en mayo y otra en junio. En total, 4.840 pesos.