El ministerio de Salud bonaerense confirmó que dos alumnos de la Escuela N°4 Ernesto Sábato, de la localidad de Hudson, tienen tuberculosis y se encuentran internados en el Hospital de Niños Pedro de Elizalde, mientras que un tercer caso se encuentra en estudio.

Uno de los estudiantes ya cuenta con el diagnóstico confirmado mientras que el segundo se encuentra en estudio aunque la sospecha es que también padece la enfermedad.

Junto con esos casos, se supo que en mayo otra alumna de la misma escuela había sido diagnosticada con la infección bacteriana, que ataca principalmente a los pulmones y que se disemina a través del aire, cuando una persona enferma tose, estornuda, habla o comparte vasos o cubiertos con alguien sano.

Según informaron fuentes del Ministerio de Salud bonaerense, «se cree que el caso de la joven confirmado en mayo es el caso índice». Y agregaron que «ya está recuperada, en su casa y con seguimiento del programa de tuberculosos de la Provincia». «Es importante destacar que no estamos ante un brote; el número de casos es el esperado para esta época del año», aseguraron.

«Hace unos días empezó a comer, porque estuvo dos meses sin alimento, bajó 12 kilos. No tenía fuerzas para alimentarse. El 2 de mayo le diagnosticaron neumonía, le dieron el alta el 15 de mayo y volvió al colegio. Como seguía con fiebre y tos, la llevé al Garrahan y el 30 de mayo me dijeron que tenía tuberculosis», detalló Débora, madre de Luz, la primera chica contagiada.

Además, destacó que si bien dio aviso a las autoridades del colegio ni bien supo el cuadro de su hija, «no se tomó ningún recaudo». «La escuela fue cerrada y desinfectada recién esta semana», dijo en declaraciones televisivas.

La tuberculosis es una enfermedad infectocontagiosa, prevenible y curable, causada por una micobacteria denominada Mycobacterium tuberculosis (conocida como Bacilo de Koch). Esta bacteria afecta principalmente a los pulmones pero también puede dañar otros órganos del cuerpo.

Las bacterias de la tuberculosis se transmiten a través del aire. Estos microorganismos pueden ser aspirados por una persona sana que se encuentra en contacto frecuente con la persona enferma y, de esta forma, contagiarse.