La curiosa propuesta de Elisa Carrió para reactivar la economía del país, dar propinas y changas, tuvo su capítulo dos este miércoles y la guionista fue la propia diputada cuando en una sesión de la cámara baja quiso explicar sus dichos del día anterior, pero al querer repetir la frase dijo «propinas y coimas».

“Quiero aclarar cuando dije que era necesario que se mantengan las propinas y las coimas”, enfatizó la diputada, que fue abucheada por la oposición reunida en el recinto en sesión especial. Para salir del paso, terminó acusando a su par del Frente para la Victoria Agustín Rossi.

«Lo miré a usted (Agustín) Rossi, me acordé de su hermano y me vino el lapsus de las coimas», corrigió Carrió, en referencia al presidente del bloque kirchnerista.

Luego volvió sobre su planteo para que los sectores medios no dejen de colaborar con propinas en momentos de vacas flacas. «Quiero aclarar que en otros momentos de crisis sociales me llamaban cartoneros, como me están llamando ahora. Y los cartoneros trabajan, las manicuras trabajan, muchísima gente que, a veces corta el pasto, trabaja», enumeró la legisladora. «Es necesario que las clases medias no supriman ese tipo de gastos; es una forma de solidaridad en momentos de crisis», agregó Carrió, haciendo un reconocimiento explícito de la gravedad de la situación.

Pero, ante la imposibilidad de continuar hablando por el murmullo que llegaba desde el otro lado del recinto, Carrió exclamó: «¿Saben qué? el progresismo estúpido no sabe lo que son los pobres«.

La intervención de Carrió finalizó cuando tomó la palabra el presidente del bloque de Cambiemos, Mario Negri, quien asumió el compromiso de tratar el proyecto de ampliación de los microcréditos presentado por el diputado Daniel Arroyo, bloqueado por el oficialismo.