Tras los casos mortales por cuadros invasivos de la bacteria estreptococo pyogenes, las autoridades buscaron llevar la calma e insistieron en que no se trata de un brote ni de una epidemia, aunque ordenaron estudiar si se trata de una cepa más virulenta para mejorar los tratamientos.
Por estas horas se está llevando adelante en el instituto de referencia ANLIS – Malbrán la investigación de la cepa de streptococcus pyogenes que está circulando, para determinar si efectivamente se trata de una cepa más virulenta.
Es que el estreptococo puede encontrarse en diversas partes del cuerpo humano (garganta, piel, mucosas, etc.) sin producir daño alguno en principio. Es uno de los patógenos más comunes en el ser humano y en general las infecciones graves ocurren en personas con el sistema inmune debilitado (inmunodeprimidas).
En el instituto hay tres equipos de profesionales abocados a esa tarea: el de Bacteriología especial, el de Resistencia antimicrobiana y el equipo de Plataforma de Genoma y bioinformática. Los equipos harán la secuenciación completa del genoma de la bacteria que permitirá identificar si se trata de una cepa más virulenta. A su vez, se realizará un perfil de respuesta o resistencia a los distintos agentes antimicrobianos o antibióticos. Esto es clave para determinar el mejor tratamiento de los casos.
“Suponemos que es la cepa agresiva, pero para poder confirmarlo se mandó a estudiar la cepa al Instituto Malbrán, que nos va a caracterizar algunas proteínas que las hace más virulentas. Sospechamos que puede tener esa virulencia”, dijo el doctor Angel Cancellara, jefe de infectología del Hospital Elizalde, donde todavía hay dos niños internados por cuadros invasivos de estreptococo y que evolucionan favorablemente.
Los especialistas remarcan que en estos tipos de cuadros invasivos, entra en juego por un lado la característica de la bacteria y por otro las características del paciente. “La forma invasiva está relacionada con factores de virulencia o mayor agresividad que pueda tener la bacteria, o con factores de inmunidad o alteración que pueda tener el paciente. Son las dos cosas”, agregó Cancellara.