Los trabajadores del Astillero Río Santiago que ayer tomaron pacíficamente las oficinas directivas contra la propuesta de Macri de “dinamitar” la empresa, ahora proponen que la empresa estatal se haga cargo de los barcos para fletes en puertos del país y anunciaron que convocarán a un «Ensenadazo» en caso de que haya despidos.
Una frase explosiva del Presidente Macri puso en alerta a los trabajadores del Astillero Río Santiago. Es que a la ya complicada situación laboral, debido a la paralización que hoy sufre la empresa ubicada en la localidad de Ensenada, se le agregó la confesión del primer mandatario, quien aseguró que Astilleros había que “dinamitarlo”.
Por eso ayer, los trabajadores de la empresa que llegó a ser la más grande de Sudamérica y actualmente es la fábrica de barcos más grandes de Argentina, tomaron las oficinas de Dirección en señal de protesta y en el marco de un “plan de lucha” para defender sus puestos de trabajo.
Los empleados del lugar perciben posibles despidos, debido a que el gobierno de la Provincia no da señales de reactivar la producción de barcos y la gestión de Mauricio Macri dejó en claro los planes que tiene para con la empresa.
Para Martín Esquerra, trabajador de Astilleros Río Santiago en el sector de Soldadura, la frase de Macri fue una “honestidad brutal” de gente que “realmente piensa así”. “La idea de beneficiar lo extranjero en detrimento de lo nacional, no es nada nuevo. Pero escucharlo así, que salga en los medios, duele mucho”, consideró en declaraciones radiales.
El trabajador e integrante de la Corriente Clasista y Combativa explicó que por estas horas rondan “sensaciones muy encontradas”, como consecuencia de la “bronca” que causó la expresión del Presidente, pero al mismo tiempo la alegría por la solidaridad que algunas personas tuvieron con los trabajadores del Astillero, como fue el gesto de Gabriela Sánchez, la hermana del Capitán del barco pesquero el Repunte, hundido el año pasado.
La mujer le preguntó personalmente a Macri por qué no se construían barcos en el país, teniendo en cuenta la existencia del Astillero de Río Santiago, y en el marco de las malas condiciones de muchas de las embarcaciones que terminan en trágicos hundimientos.
En este sentido, Esquerra contó que la construcción del buque Eva Perón, destinado para Venezuela, está en un 95% y solo falta que el gobierno compre algunos insumos, porque “la mano de obra está”. Es por esto que la paralización del Astillero pareciera ser un preludio para los despidos.
“Nosotros tenemos la respuesta que es el Ensenadazo, ante cualquier despido vamos a convocar a toda la población de La Plata, Berisso y Ensenada, para defender esta fábrica que fue la más grande de Sudamérica y la más grande de barcos en el país”, manifestó el soldador.
Por último, Esquerra contó que actualmente muchos países del mundo tienen una similar crisis con los astilleros porque hay un superproducción de barcos. Sin embargo, ese problema es solucionado destinando las naves para los fletes que necesitan los puertos locales. “En Argentina, todos los conteiners que llegan al puerto de la capital y Rosario son transportados por fletes que dependen de empresas navieras extranjeras”, dijo el operario.