La primera jornada del paro de 48 horas convocado por los gremios docentes de la Provincia de Buenos Aires, en reclamo de un aumento salarial superior al ofertado por el Gobierno de María Eugenia Vidal, arrancó esta mañana con un endurecimiento de las posiciones en pugna: los docentes afirman que el acatamiento a la medida de fuerza es del 85%, mientras que desde el Ejecutivo advirtieron con descuentos a quienes hayan adherido a la medida e intentan bajar el nivel de impacto de la huelga. 

Las entidades gremiales afirmaron que el nivel de adhesión al paro es alto. En ese sentido, el Secretario General de Suteba, Roberto Baradel, señaló que «es un paro contundente y fracasó el intento de meter miedo para que la gente no pare». Y agregó que «si un pequeño porcentaje de maestros va a trabajar es por miedo a los descuentos».

Por su parte, desde el Poder Ejecutivo niegan que la huelga haya tenido una alta injerencia. «Están llegando las planillas de los 135 municipios, pero estamos viendo que no ha sido de alto impacto”, afirmó Sergio Siciliano, subsecretario de Educación bonaerense.

La medida de fuerza resuelta por los sindicatos está acompañada de una movilización hacia el Congreso de la Nación que se lleva a cabo hoy desde las 11 de la mañana.

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