El PJ bonaerense convocó a una cumbre partidaria para este viernes en San Bernardo que no está exenta de reproches internos por algunos pasos previos que dio su nuevo conductor, el intendente de Merlo Gustavo Menéndez, que no cayeron bien en algunos sectores del peronismo de la Provincia.

Fotos sin contenido, es una de las críticas que más se escuchó entre algunos intendentes peronistas sobre los encuentros que Menéndez mantuvo con Diego Bossio, Sergio Massa, Miguel Ángel Pichetto o Juan Manuel Urtubey, y que fueron retratados en los medios nacionales.

En concreto, se cuestiona que el PJ bonaerense no haya tomado posición pública unificada los temas centrales de la actualidad socioeconómica para los habitantes de la Provincia, como los cortes de luz generalizados de hace unos días atrás o medidas impulsadas por la gobernadora María Eugenia Vidal como la autorización de un aumento de las tarifas eléctricas de un 32% o la crítica situación de la empresa provincial de aguas (ABSA), que convoca a audiencia pública el próximo 2 de febrero.

Por eso, una de las propuestas que se discutirá en la cumbre de San Bernardo será la convocatoria a los equipos técnicos del partido para comenzar a producir documentos públicos que dejen sentada la posición orgánica del PJ como oposición, sobre temas que inciden en la vida cotidiana de los bonaerenses, en línea con la caída de la imagen del oficialismo tras la reforma jubilatoria.

La semana pasada intendentes del interior de la Provincia también se reunieron en La Plata para analizar en forma colectiva el Pacto Fiscal impulsado por la gobernadora, al que finalmente decidieron no adherir ya que consideran que condiciona la autonomía municipal.

Incluso, en las últimas semanas hubo expresiones críticas hacia el Gobierno desde sectores más ligados a posiciones dialoguistas como el Frente Renovador de Massa y el Bloque Justicialista de Bossio, que anticiparon su oposición a la ley de reforma laboral, en sintonía con lo planteado incluso por sectores de la CGT.