El Gobierno comenzó ayer una negociación con referentes de organizaciones sociales, sindicales, políticas y de derechos humanos, a fin de consensuar la zona en la que el próximo viernes 30 se realizará la marcha principal contra la Cumbre de Líderes del G20.
Por el Ejecutivo estuvo presente el jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Gerardo Milman, quien se reunió en la sede del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj), en Piedras al 700, con el titular del organismo, Adolfo Pérez Esquivel; la integrante de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora Nora Cortiñas; y el secretario general de ATE, Hugo «Cachorro» Godoy, entre otros.
«El Gobierno es responsable de
que no haya incidentes durante
las marchas. Queremos prevención
y no represión», dijo Adolfo Pérez Esquivel.
«Hoy iniciamos un sano diálogo con las organizaciones que conforman la confluencia #FueraG20. Nos volveremos a reunir el martes próximo. Queremos garantizar la libertad de reunión y expresión en el marco de la no violencia y paz«, afirmó Milman en su cuenta de la red social Twitter.
El tema central de la negociación pasa por la zona donde se desarrollará la movilización que las agrupaciones anunciaron para el próximo viernes, ya que el Gobierno les advirtió que no podrán llegar al Obelisco, como habían barajado en un principio. Sucede que todas las posibles vías por donde pensaban marchar las organizaciones se encuentran dentro de las zona de «restricción y veda» que el Poder Ejecutivo dispuso en el centro de la Ciudad, en el perímetro que abarca Independencia, Entre Ríos-Callao, Las Heras, Sarmiento, Figueroa Alcorta y La Pampa.
Por su parte, el secretario general de ATE, Hugo Godoy señaló que «las organizaciones queremos que se nos garantice toda la seguridad y no haya provocaciones para que el 29 se pueda hacer la Cumbre de los Pueblos con carpas en el Congreso y el 30 marchar y concentrar» y explicó que «en principio» el funcionario les dijo que no había problemas para el acampe el jueves.
En declaraciones a la agencia NA, el secretario general de ATE detalló: «Nuestra intención era ir hasta el Obelisco, pero allí no podía ser porque se va a hacer la cena en el Colón. Milman planteó la posibilidad de limitar la zona de veda para posibilitar la marcha. Quedamos en hacer consultas y plantear algunas alternativas respeto de las zonas, para ver si se puede correr la veda hasta Rivadavia y que se pueda ir por Avenida de Mayo».