El presidente Alberto Fernández anunció este domingo la suspensión de las clases, el cierre de fronteras y la disposición de licencias para mayores de 60 años, como alguna de las medidas para detener la propagación del Covid-19.

«Vamos a suspender las clases hasta el 31 de marzo», precisó Alberto Fernández tras la reunión con sus ministros en la residencia de Olivos, aunque aclaró que «las escuelas no van a estar cerradas».

 

«Tenemos que tratar de que no se convierta en un virus autóctono», argumentó el Presidente aunque admitió: «Tenemos que luchar contra dos cosas: la pandemia y la psicosis».

Fernández precisó que se cerrarán las fronteras del país durante los próximos 14 días porque «el episodio del coronavirus ya no viene sólo de Europa sino que afecta a países limítrofes y a nosotros mismos».

«Por las fronteras terrestres vienen turistas que vienen de las zonas de riesgo», explicó el mandatario aclaró que quedan exceptuados de esa restricción los «argentinos nativos o residentes en Argentina».

El presidente agregó que el Gobierno dispuso el «licenciamiento de todas las personas mayores de 60 años» para que «se queden en sus casas, tranquilas y disfruten» de sus hogares, lejos de la posibilidad de contagio de coronavirus.

La de mayores de 60 años es la franja etaria de mayor riesgo ante el avance del coronavirus. También se licenciará a las embarazadas y a las personas con condiciones de riesgo: mayores de 65 años, personas con enfermedades crónicas, personas inmunosuprimidas, personas en tratamiento de diálisis.

Fuentes oficiales confirmaron que las medidas serán tanto para el sector público como para el privado. El esquema y los detalles de la implementación estarán este lunes, luego de una reunión de los integrantes del gabinete económico y social.

 

«Si atacamos el problema de chiquito vamos a
evitar que crezca. El modo solidario es cuidarnos
nosotros para cuidar a los otros». AF

 

Asimismo, indicó que «vamos a asignarles horarios de atención específicos en lugares como bancos y centros de salud para que no tengan que vivir momentos de aglomeración de gente».

«Junto al gobernador bonaerense Axel Kicillof y el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, hemos evaluado disminuir el tránsito en el AMBA ya que el 70% de los afectados está en Buenos Aires y alrededores», adelantó.

«Si atacamos el problema de chiquito vamos a evitar que crezca. Por lo menos frenar el crecimiento exponencial y que sea paulatino, de modo sea posible controarlo con nuestro sistema sanitario. Que nadie se inquiete», analizó Fernández.

«Todos tenemos que tener conciencia de la responsabilidad social. El modo solidario es cuidarnos nosotros para cuidar a los otros. Los que tengan que hacer la cuarentena lo harán y si no serán perseguidos judicialmente. La soberbia de un tonto no va a poner en peligro la Argentina», pidió el mandatario.