El Gobierno cerró este miércoles el registro para anotar exportaciones de granos al exterior, conocido como Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE), lo cual indica una inminente suba en las retenciones, tal como había trascendido en las últimas horas.
Se trata de la primera medida oficial que confirma que subirán las retenciones para las exportaciones a la soja del 30% al 33%. Un comunicado de la Secretaría de Mercados Agropecuarios informó que desde las 0 horas del 26 de febrero quedaron suspendidas las operaciones del Registro de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior de productos agrícolas.
El Estado toma esa medida cada vez que se producen subas en el nivel de retenciones para evitar que las exportadoras se apuren a inscribir anticipadamente en el registro de exportaciones ventas con la retención «vieja».
La decisión fue revelada por el periodista de temas agropecuarios Matías Longoni en su cuenta de Twitter y en el comunicado se detalla que la resolución de la Secretaría fue emitida por orden del ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra.
Luego de que el fin de semana trascendiera el aumento de 3% las retenciones a la soja y sus derivados (harina y aceites) pasando el tributo de 30% a 33%, distintas entidades agropecuarias expresaron su disconformidad con la medida y adelantaron que podrían realizar protestas.
https://twitter.com/matiaslongoni/status/1232672659407867909
«Una medida de ese tipo caería muy mal. Además, prometieron un alivio al sector y, hasta ahora, no cumplieron. Nuestro sector es uno de los que la está pasando mal, y es a uno a lo que se le está pidiendo un esfuerzo”, expresó el lunes Carlos Achetoni, titular de la Federación Agraria.
Desde Coninagro, cuyo titular es Carlos Iannizzotto, también se manifestaron contra la medida, que hasta hace pocos días sólo era un trascendido sobre la posibilidad de que el presidente Alberto Fernández lo anuncie en la apertura de sesiones el domingo 1° de marzo.
Los productores, muchos autoconvocados que no responden a las entidades tradicionales, vienen realizando asambleas y tractorazos en el interior. En todas las movilizaciones ya realizadas salió un rechazo a cualquier suba de las retenciones y un pedido de un cese de comercialización a nivel nacional si eso ocurre. La Mesa de Enlace estaba evaluando eso la semana pasada, pero lo frenó a la espera del encuentro con Basterra.
Los ruralistas insisten que el campo ya aportó, solo por retenciones, unos US$100.000 millones desde 2002. La previsión es que este año, según cálculos de Néstor Roulet, productor, el Estado podría quedarse con US$72000 millones, esto es considerando una eventual mayor presión impositiva.
Por estas horas diversos estudios alertan que una suba de retenciones golpeará a las zonas más alejadas de los puertos y terminarán cayendo tanto la inversión como el área sembrada. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estima que podría haber una retracción de 400.000 hectáreas en la siembra de soja en la próxima campaña.