El precandidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, realizó una presentación ante la Justicia para impugnar el método de escrutinio provisorio de la empresa Smartmatic, que se utilizará en las PASO, en las elecciones generales y en un eventual balotaje.
En el texto presentado ante la jueza con competencia electoral María Servini, se solicita que «se deje sin efecto la aplicación del proceso de digitalización de los telegramas de escrutinio de cada mesa, transmisión y contabilización de los resultados provisorios» de las PASO del próximo domingo.
Además, se pide la designación de interventores judiciales «para presenciar todos los procesos técnicos de escrutinio el día de la elección y para la realización de auditorías» posteriores, para las que se podría «contar con la colaboración técnica del Consejo Interuniversitario Nacional», según el escrito.
De manera puntual, el kirchnerismo solicita que «se ordene el apartamiento inmediato de la empresa Smartmatic del proceso electoral en las PASO, en las generales y en la eventual segunda vuelta». El amparo fue firmado por los apoderados del Frente de Todos Jorge Landau, Patricia Alejandra García Blanco, Eduardo Gustavo Adolfo López Wesselhoefft, Graciana Irma Ruth Peñafort y Gerónimo Javier Ustarroz.
En otro apartado del documento, el Frente de Todos reclama que la Justicia ordene al Gobierno «no alterar directa ni indirectamente, ni demorar ni suspender el envío y/o recepción desde los centros de votación hacia los centros de procesamiento de los telegramas confeccionados por las autoridades de mesa», ante lo cual reclama la participación de «interventores veedores judiciales».
En las últimas horas, la polémica en torno a Smartmatic, la compañía a cargo del escrutinio provisorio del próximo fin de semana, tomó fuerza. El propio Alberto Fernández afirmó el pasado domingo: «Acá el problema es la manipulación del escrutinio provisorio, que permite instalar un resultado que no es tal. Las fallas con Smartmatic son tremendas. Me temo que el Gobierno busque manipular el escrutinio provisorio y así instalar un resultado falso».
La sucursal argentina de Smartmatic -«una sociedad de responsabilidad limitada constituida según las leyes de los Países Bajos», según el Boletín Oficial- fue inscripta en el país en febrero del 2015 con un capital inicial de 5 mil dólares y representada legalmente por Chandler Vladimir Molina Colmenares, un venezolano con domicilio real en la ciudad de Panamá. El 100% del capital de la compañía es controlado por SGO Corporation Limited, con domicilio en Londres, Inglaterra, según los registros.