El fiscal electoral Jorge Di Lello apeló hoy la intervención dispuesta en el Partido Justicialista por la jueza María Servini y pidió a la Cámara Electoral que anule todo lo actuado bajo las órdenes de Luis Barrionuevo, al entender que hubo “una intromisión injustificada en la vida interna” del partido.

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En duros términos, el fiscal criticó a la jueza Servini y sostuvo que la explicación del “vaciamiento político” que esgrimió la magistrada “encierra un caprichoso y antojadizo accionar que convierte en arbitrarios los fundamentos que la llevaron a conceder la intervención a través de la medida precautoria”.

«No puede soslayarse que los fundamentos de la sentencia,
en su totalidad han sido solamente de carácter político y no jurídico,
lo que evidentemente condujo a que se arribara a una conclusión
alejada de los preceptos legales y de razonabilidad, que deben
acompañar a cualquier intervención jurisdiccional”. 
Dictamen del fiscal Di Lello.

Pero Di Lello no solo disparó sus cañones contra Servini sino que además apuntó a Barrionuevo: “En relación al interventor designado, se observa que difícilmente podrá cumplir con la ecuanimidad que esa función requiere».

Antes de terminar su dictamen, Di Lello hizo una sugerencia, que pareció un mensaje a «los distintos responsables de los órganos partidarios de la totalidad de las agrupaciones nacionales y distritales», para «recordar la importancia del apego a las normas estatutarias y legales que componen el régimen político argentino» frente al «proceso de liquidez y apatía en las cuestiones públicas institucionales y partidarias que afectan la credibilidad y participación de la ciudadanía en la actividad política».

Con el dictamen fiscal, el caso llega ahora a la Cámara Electoral, donde intervendrán Santiago Corcuera y Alberto Dalla Vía para revisar si confirman o no la intervención. Según la ley, no hay plazos para resolverlo.