El arzobispo de La Plata, Víctor Manuel Fernández, cuestionó hoy al presidente electo Alberto Fernández por impulsar la legalización del aborto. “Le preguntaría si vale la pena comenzar su mandato con un tema que tanto divide a los argentinos”, aseguró el religioso cercano al Papa Francisco.
Ayer, luego de mostrar en varias ocasiones su postura a favor de despenalizar el aborto, el presidente electo dijo por primera vez que su administración enviará “un proyecto de ley” al Congreso para tratar este tema “tan pronto” como asuma el Gobierno.
“Quisiera que el debate no sea una disputa entre progresistas y conservadores, entre revolucionarios y retrógrados, es un problema de salud pública que debemos resolver y hay que asumirlo así”, señaló el líder del Frente de Todos.
Por su parte, el arzobispo de La Plata aseguró en un largo posteo que siente “preocupación” debido a que había escuchado a Fernández decir antes de las elecciones que no consideraba el aborto como un tema prioritario “o una urgencia”. “Muchos le votaron confiando en estas palabras”, agregó.
Luego amplió: “Me preguntan si no estoy en contra del aborto. Siempre lo estuve, desde que tengo 12 años. No por ser conservador o misógino o machista, sino porque creo que esa niña que está creciendo dentro de su madre también tiene derechos. Recuerdo una vez más que el presidente Tabaré Vázquez, de izquierda y agnóstico, vetó una ley de aborto. No hace falta ser creyente ni dogmático para defender la vida por nacer. Escribí decenas de artículos sobre este tema. Quien quiera saber qué pienso lo verá escrito. No lo digo en los pasillos a oscuras”.
En su exposición comenzó por señalar que “una cosa es despenalizar a la mujer que ya abortó y otra cosa es legalizar el aborto”. Según el sacerdote hoy en día “casi ninguna mujer va presa” por haber abortado, por lo tanto despenalizar sería “simplemente blanquear esa situación”. No obstante, evaluó que legalizarlo significaría “facilitar el aborto para quien quiera hacerlo por cualquier causa” y también implicaría afirmar “que el niño por nacer es sólo un montón de células animales y que no tiene ningún derecho”.
“Si se dice que se trata sólo de un tema de salud pública, entonces estamos queriendo agarrar al chancho por la cola, o poniendo el carro antes que el caballo», dijo en tono campero Fernández y agregó que «de las muertes maternas que hay en el país, una pequeña parte son por aborto procurado. Más del 80 por ciento de estas mujeres se mueren por llegar al parto desnutridas, diabéticas sin tratar», aseguró.