La maratón legislativa iniciada ayer seguirá esta tarde. Tras la sanción de la reforma previsional, la Cámara de Diputados comenzará con el tratamiento de la reforma tributaria. Se trata del proyecto que modifica la arquitectura de impuestos del país y que generó pujas entre el Gobierno nacional y las provincias. En ese proyecto estaba el impuesto al vino que finalmente fue eliminado.
Ese proyecto estaba en el temario de la convocatoria a sesiones extraordinarias convocadas por el Ejecutivo. Tras la sanción de la reforma previsional, la Cámara pasó a un cuarto intermedio hasta las 17.
La reforma fiscal también es parte del acuerdo entre los gobernadores y la Nación, que firmaron un pacto por el cual se comprometen a ceder demandas y hacer ajustes puertas adentro.
Algunas claves
A último momento el proyecto tuvo algunas modificaciones que sorprendieron y podrían generar debate en el recinto. Uno de ellos fue que quedaron incluidos en el impuesto a las ganancias las indemnizaciones por despido y los retiros voluntarios, que hasta ahora estaban exentas. «Sin perjuicio de las demás disposiciones de esta ley, quedan incluidas en este artículo las sumas que se generen exclusivamente con motivo de una desvinculación laboral, cualquiera fuere su denominación, que excedan de los parámetros mínimos previstos en la normativa laboral aplicable. Cuando las sumas abonadas tengan su origen en un acuerdo consensuado (procesos de mutuo acuerdo o retiro voluntario, entre otros) estarán alcanzadas en cuanto superen los parámetros mínimos previstos en la normativa laboral aplicable para el supuesto de despido sin causa», indica el proyecto.
El objetivo es que la presión tributaria caiga al 1,5% del PBI. Las empresa que reinviertan sus utilidades tendrán una rebaja en la alícuota del impuesto a las ganancias del 35% al 25% y se puede devengar lo que se paga como impuesto al cheque a cuenta de ganancias. Las empresas no pagarán aportes patronales hasta una remuneración bruta de 12 mil pesos. Se les devuelve el IVA de manera anticipada a las empresas que hayan invertido y no hayan podido recuperar lo aportado por ese impuesto.
Intentaron imponer un impuesto interno al vino y subir los de las bebidas azucaradas. Al final se eliminó el gravamen al vino y sí se subió a la cerveza.
Se implementará un impuesto a la renta financiera delas personas, ocn una tasa del 5%, a las ganancias mayores a 52 mil pesos en plazos fijos y del 15% n las colocaciones en dólares que etén bajo leyes argentinas.