Una intensa lluvia y algo de granizo cayeron ayer sobre la Ciudad de Buenos Aires y alrededores, lo que anegó algunas calles y sirvió para quebrar casi dos meses sin precipitaciones y anticipar la llegada de las bajas temperaturas, típicas del otoño, informaron fuentes del Servicio Meteorológico Nacional.

El mal tiempo provocó una baja de más de 10 grados en la temperatura ya que por la tarde el termómetro rozó los 30 grados y en la noche pasó por debajo de los 20. La llegada de viento del sur en el cierre del día acentuó el descenso de la temperatura que se mantendrá durante los próximos días.

“Desde diciembre a la fecha fue una situación atípica ya que normalmente, sumadas esos tres meses, caen unos 300 milímetros en la Ciudad, pero lo que llevamos hasta ahora son 150 milímetros, la mitad de lo que debería llover normalmente”, destacó la pronosticadora Cindy Fernández.

Indicó que a partir de esta lluvia “vendrán temperaturas más otoñales, la marcas va a quedar planchada y no superará los 30 grados, mientras que se prevé para el sábado que vuelva a llover en la ciudad”.

Fernández detalló que la última precipitación fuerte en la Ciudad “fue a principios de enero, cuando cayeron 22 milímetros”, y aseguró que esta falta de lluvias en la Ciudad se da en concordancia con lo que sucede en toda la provincia de Buenos Aires.

“Excepto La Plata, toda el área metropolitana padeció en diciembre enero y febrero lluvias por debajo de lo normal. Ahora hubo un cambio en la atmósfera que permite el paso de frente fríos que son los que dan lugar a la tormentas”, explicó.

Fernández destacó que “cambió la masa de aire, que a partir de ahora será mas fría” y destacó que estos cambios “ya se empezaron a dar desde el domingo pasado, cuando el mal tiempo afectó el oeste y el norte del conurbano” Para hoy se prevé una máxima de 24 grados.

Evacuados en el norte

Más de 450 familias, muchas de ellas aborígenes, siguen evacuadas por los desbordes del río Pilcomayo en los departamentos formoseños Bermejo y Ramón Lista, por lo que se mantiene el alerta en esa zona, a unos 500 kilómetros de la capital provincial, ante el riesgo de que cedan las defensas.

Especialistas de la fundación Gran Chaco dijeron que sigue en estado de alerta la zona de El Potrillo en Ramón Lista, uno de los departamentos que hace más de un mes sufre los desbordes del Pilcomayo, que mantienen aisladas a las comunidades de Selva María y El 17.

Más de 450 familias permanecen en el centro de atención “Solidaridad”, que dispuso el gobierno provincial para albergar a los inundados y asistirlos con mercaderías y atención médica y también dar clases en ese mismo lugar a los niños en edad escolar.