El Gobierno actualizó el impuesto sobre los combustibles, lo que derivó en una suba en los precios de la nafta y el gasoil, que aumentan un 3% en promedio desde este jueves 1 de agosto.
Tras la postergación del ajuste en julio, el Ejecutivo dispuso aplicar un incremento moderado del 1% en los Impuestos sobre los Combustibles Líquidos (ICL) y al Dióxido de Carbono, desde el primer día del octavo mes del año.
En línea con la decisión de postergar la suba en los meses precedentes para evitar un mayor impacto en la inflación, la decisión de la administración de Javier Milei fue “diferir parcialmente los efectos de los incrementos que resultarían aplicables a partir del 1° de agosto de 2024 para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil”.
La actualización en los tributos se suma a la devaluación mensual del peso frente al dólar oficial, del 2%, lo que explica el incremento total del 3% que aplican las petroleras a partir de este jueves.
De esta manera, el aumento está por debajo de la variación de precios estimada en julio. Sin embargo, en lo que va del año, los combustibles subieron más del 126% promedio, lo que está por encima de la inflación.
Con el nuevo aumento, los precios en los surtidores de YPF, la petrolera líder del mercado, pasaron de $941 a la zona de los $970 por litro en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Mientras que el gasoil trepó de $979 a unos $1.008 por litro. Se estima que el resto de las firmas actualicen sus valores en el mismo rango.
Los nuevos valores de la nafta y el gasoil en las estaciones de servicio de YPF en CABA
- Nafta súper: $969
- Nafta premium: $1197
- Gasoil: $1008
- Gasoil premium: $1281
Los otros aumentos que llegan en agosto
El ministerio de Economía decidió volver a aplicar los aumentos mensuales en los servicios de electricidad y gas natural, que se sumarán al resto de los ítems que vienen siendo incrementados e impactan en el costo final que pagan los usuarios en sus facturas.
Además, para el octavo mes del año están previstos incrementos en telecomunicaciones y telefonía que rondarán el 5% y en las prepagas en torno al 5,5%. En tato, los alquileres sufrirán un ajuste del 248% anual para quienes hayan firmado contrato con la ya derogada ley de alquileres en 2022 y 2023.