La Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de publicar el listado de enfermedades en las que cree que se deberían concentrar los esfuerzos de innovación y desarrollo de vacunas, medicamentos y métodos diagnósticos por parte de empresas, gobiernos y grupos de investigación ya que representan el mayor riesgo para la salud pública mundial.
Debido a su potencial epidémico y las pocas o nulas armas para contrarrestarlas, este conjunto de enfermedades podrían generar una calamidad regional, nacional o mundial. La primera lista de enfermedades priorizadas de la OMS se publicó en diciembre de 2015. En 2017 se revisó y este año ha vuelto a actualizarse.
Entre las nueve enfermedades más peligrosas figuran:
1) la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo
2) la fiebre hemorrágica del Ébola y la fiebre hemorrágica de Marburgo
3) la fiebre de Lassa
4) el síndrome respiratorio por coronavirus de Oriente Medio (MERS-CoV)
5) el síndrome respiratorio agudo grave (SARS)
6) la infección por el virus Nipah
7) la fiebre del valle del Rift (RVF)
8) el virus Zika
9) la Enfermedad X
“Estas enfermedades plantean riesgos importantes para la salud pública y se necesita más investigación y desarrollo, incluida la vigilancia y el diagnóstico. Deben ser observados cuidadosamente y considerados nuevamente en la próxima revisión anual. Se alientan los esfuerzos intermedios para comprenderlos y mitigarlos”, anotaron los expertos de la OMS en un comunicado.
Enfermedad X:
La inclusión de la “enfermedad X” es una de las novedades de este nuevo listado. Con este término los expertos quisieron representar la posibilidad de una epidemia internacional grave causada por un patógeno desconocido actualmente, y buscan sensibilizar a los estados miembros de la OMS sobre la necesidad de estar preparados ante una posible emergencia causada por un patógeno todavía desconocido.
Se trata de una bacteria o un virus hipotéticos que podrían surgir en el futuro y causar una infección generalizada en todo el mundo. «Una epidemia devastadora puede comenzar en cualquier país y en cualquier momento, y matar a millones de personas, porque no estamos preparados, porque aún somos vulnerables», reconoció el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
La»enfermedad X» puede desencadenarse por una enfermedad zoonótica, una que se transmite de animales a humanos, y luego se propaga para convertirse en una epidemia. “Puede parecer extraño agregar una ‘X’, pero el objetivo es prepararnos con vacunas y pruebas de diagnóstico”, señalaron miembros de la OMS. Un ejemplo claro es el virus del VIH, que científicos afirman, que pasó de los chimpancés a los humanos.
La profesora Marion Koopmans, que labora en el Centro Médiocio Erasmus en Rotterdam y también asesora de la OMS, declaró que la frecuencia con la que aparecen las enfermedades zoonóticas se está volviendo mucho más rápida. Ella agregó: «La intensidad del contacto animal y humano es cada vez mayor a medida que el mundo se desarrolla. Esto hace que sea más probable que surjan nuevas enfermedades. Otro factor que lo propicia son los viajeros y el comercio, ya que provoca que sea mucho más probable que se propague «.
El objetivo de la inclusión de la «enfermedad X» no es asustar a la población, sino hacer un llamado de atención a los funcionarios que se encargan de la salud pública para que estén preparados para todas las posibles amenazas que puedan alterar la salud de la población.